Beijing, 9 ene (RHC) Negociadores de China y Estados Unidos concluyeron aquí una ronda de diálogos que se prolongaron por tres días consecutivos y tuvieron como propósito conformar un acuerdo mutuamente satisfactorio para terminar la guerra comercial.

Lu Kang, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, confirmó en rueda de prensa la conclusión de las conversaciones, pero no ofreció detalles ni tampoco informó si hubo algún convenio, indica Prensa Latina.

Sin embargo, aseguró que la extensión hasta esta jornada de las pláticas es una evidencia del compromiso de las partes con buscar una solución al conflicto que laceró los vínculos económico-comerciales durante 2018.

'Si hubo buenos resultados de las conversaciones entre los dos países, no solo será beneficioso para China y Estados Unidos, sino también representará una excelente noticia para la economía mundial', añadió el vocero.

Más temprano, miembros de la delegación norteamericana confirmaron brevemente a periodistas que las negociaciones siguieron por tercer día consecutivo y transcurrieron en un entorno positivo.

Se trató de un cambio imprevisto, porque inicialmente se programaron solo para el lunes 7 y martes 8.

El hecho que prosiguieran hasta hoy tuvo un efecto estimulante en las principales bolsas de valores de Asia.

Las pláticas sesionaron en Beijing a nivel viceministerial y se espera propicien la elaboración de una hoja de ruta para implementar los consensos alcanzados por los presidentes Xi Jinping y Donald Trump en la reunión que ambos sostuvieron el pasado 1 de diciembre en la capital de Argentina.

Según el Ministerio local de Comercio, se enfocaron en asuntos delicados como la protección de los derechos de propiedad intelectual, cooperación tecnológica, acceso al mercado y balance comercial.

También abordaron la importación de productos agrícolas, energéticos y automóviles.

El Ministerio acotó que todos esos puntos están acordes con los planes del gigante asiático de profundizar su política de reforma y apertura.

Cuando Xi y Trump conversaron en Buenos Aires, China se comprometió a resolver las preocupaciones que genera esa decisión, mientras Estados Unidos aseguró que corregiría las inquietudes de Beijing en materia económica y comercial.

Las delegaciones tienen la encomienda de encontrar un punto medio que permita implementar esos consensos y zanjar de una vez los asuntos conflictivos, pero sobre la base del respeto, equidad y beneficio para los dos lados.

El eventual convenio también debe conllevar a levantar los gravámenes aplicados desde julio pasado y normalizar las relaciones de negocios.

(Prensa Latina)