Caracas, 10 jun (RHC) La vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, evaluó el proceso inversionista en la planta procesadora de arenas auríferas de Puerto Ordaz, estado de Bolívar, con capacidad para procesar 150 toneladas de material al día.
Resultado de una alianza estratégica entre el Gobierno y el sector privado, la industria atraviesa por labores de ampliación con el fin de elevar el volumen de procesamiento hasta 350 toneladas diarias para finales de 2019, como parte de las acciones para incrementar la producción de oro, reseñó la Vicepresidencia.
El Ejecutivo venezolano trabaja en la puesta en marcha de Plan Nacional Minero 2019-2025 para establecer al país como la primera reserva de oro a nivel mundial, con ocho mil 900 toneladas del metal precioso.
En recientes declaraciones, el ministro para el Desarrollo Minero Ecológico, Víctor Cano, destacó que el programa busca crear alianzas con los grandes, mediano y artesanales productores para el desarrollo de todo el potencial minero de la nación sudamericana, con responsabilidad ambiental.
Subrayó que Venezuela producirá 80 toneladas anuales de oro a partir de 2025, como una de las metas establecidas en el proyecto gubernamental.
El presidente de la República, Nicolás Maduro, destinó una inversión de siete mil 700 millones de euros, a través de alianzas con socios nacionales e internacionales, para desplegar el Plan Nacional Minero 2019-2025.
Maduro informó que la nación sudamericana cuenta con 1,2 billones de euros en reservas minerales de oro, diamante, níquel, bauxita, feldespato, fosfato y hierro.
Mientras el canciller de Venezuela, Jorge Arreaza, denunció la posición del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) respecto a la migración de los connacionales.
En un mensaje publicado en su cuenta en Twitter, el titular de Relaciones Exteriores rechazó que este organismo manipule la opinión pública sobre la movilidad de ciudadanos provenientes de la nación sudamericana con motivos políticos.
Está de más recordarle a Acnur que su mandato se circunscribe a refugiados. Tratar de obtener recursos utilizando la migración económica y confundiendo a la opinión pública, no sólo escapa de su mandato, sino que devela una clara estrategia política intervencionista, escribió.
La jornada anterior, Arreaza destacó que tras el fracasado golpe de Estado perpetrado del 30 de abril con directrices del gobierno estadounidense, los autores del delito pretenden reposicionar el tema migratorio en los medios de comunicación para agredir a Venezuela.
El organismo internacional vuelve a su rol de instrumentalizar la migración al extremo de mentir e inflar las cifras para pedir y recibir más recursos con un destino incierto, añadió.
Arreaza lamentó que Acnur insista en instrumentalizar la migración del país a la vez que manifestó que estas acciones pretenden ir “en medio de una rebatiña parasitaria, a costa de la dignidad y los Derechos Humanos de los venezolanos”.