Brasilia, 30 sep (RHC) El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva desestimó nuevamente la progresión del régimen semiabierto como lo solicitó el Ministerio Público Federal (MPF) porque es inocente de todas las acusaciones contra su persona.
El abogado Cristiano Zanin Martins, quien forma parte de su defensa, ratificó la posición del exdirigente obrero que no aceptará el pedido del MPF, 'dada la naturaleza ilegítima del proceso y la condena injusta'.
Los fiscales de la operación anticorrupción Lava Jato solicitaron a la Justicia Federal que el exmandatario, de 73 años, pase al régimen semiabierto que le permitiría salir de la cárcel durante el día para trabajar y regresar después a dormir.
El equipo de agentes públicos de la Lava Jato argumentó que el exjefe de Estado ya cumplió una sexta parte de la condena que recibió y debe progresar para un régimen más blando, tal y como determina la ley penal brasileña.
Tras abandonar la sede de la Policía Federal en Curitiba, capital del sureño estado de Paraná, donde el exgobernante cumple prisión política desde el 7 de abril de 2018, el jurista leyó una carta escrita por Lula en la cual confirma que 'no acepta ninguna negociación de las condiciones establecidas por el tribunal, que es su derecho'.
Zanins Martins asegura que el exsindicalista 'no reconoce la legitimidad del juicio y la condena impuesta por el exjuez Sérgio Moro. No acepta ninguna condición impuesta por el Estado. Esta es la posición de Lula, materializada en una carta, para ser muy claro'.
En la misiva, el exmetalúrgico insiste en que no aceptará prebendas y que 'ahora depende de la Corte Suprema corregir lo que está mal para una justicia independiente e imparcial'.
Señala que los fiscales de la Lava Jato deberían ofrecer disculpas al pueblo brasileño, 'a los millones de desempleados y a mi familia, por el mal que le hicieron a la democracia, a la justicia y al país'.
Refiere que demostró que son falsas las imputaciones contra él y Moro, el fiscal Deltan Dallagnol y la Lava Jato son los que 'están presos en las mentiras que contaron a Brasil y al mundo'.
El expresidente reconoció que tiene plena consciencia de las decisiones que tomó y recalcó que no descansará en cuanto la verdad y la justicia vuelvan a prevalecer.
'No cambiaré mi dignidad por mi libertad', subrayó una vez más el fundador del Partido de los Trabajadores. (Fuente:PL)