La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha dicho “varias veces que no hay evidencia de que el nuevo coronavirus se haya creado en un laboratorio. Muchos expertos médicos conocidos en el mundo también creen que las afirmaciones de las llamadas fugas de laboratorio no tienen base científica”, dijo el jueves el portavoz de la Cancillería china, Zhao Lijian.
En declaraciones a la prensa en Beijing, el vocero enfatizó que este asunto es científico y, por tanto, debería ser estudiado por científicos y expertos.
De este modo, el diplomático respondió a una pregunta sobre las acusaciones de EEUU de que el virus letal se originó en un laboratorio en la ciudad china de Wuhan, donde se detectó por primera vez la COVID-19 a fines de 2019.
En una conferencia de prensa en la Casa Blanca, el presidente estadounidense, Donald Trump, dijo el miércoles que Washington está tratando de determinar si el coronavirus se creó en un laboratorio en Wuhan.
A su vez, el secretario de Estado Mike Pompeo afirmó que “sabemos que este virus se originó en Wuhan”. “Realmente necesitamos que el Gobierno chino” ayude a explicar “exactamente cómo se propagó este virus”, agregó.
Mientras EE.UU. intenta echar la culpa de la pandemia a China y la acusa de producir el virus en sus laboratorios, el pasado marzo, Zhao aseguró que el origen de la COVID-19 se hallaba en realidad en EEUU y especificó que el Ejército del país norteamericano podría haber llevado el nuevo coronavirus a la ciudad de Wuhan.