En el primer trimestre de 2020, la participación del dólar estadounidense en el comercio entre Rusia y China cayó por primera vez por debajo del 50 por ciento, según datos recientes del Banco Central de Rusia y el Servicio Federal de Aduanas.
En esa fecha, el dólar se utilizó para solo el 46 por ciento de los acuerdos entre los dos países, y el uso de la moneda europea, el euro, experimentó un crecimiento histórico, alcanzando el 30 por ciento, mientras que las monedas nacionales representaron el 24 por ciento, también un nuevo máximo.
Rusia y China han reducido considerablemente el uso de la moneda estadounidense en el comercio bilateral durante los últimos años después de que se elevara la tensión en sus relaciones con EEUU.
En 2015, aproximadamente el 90 % de las transacciones bilaterales entre Moscú y Pekín se realizaron en dólares. Sin embargo, tras el estallido de la guerra comercial entre Estados Unidos y China y la decisión de estos dos aliados para alejarse del dólar, la cifra había caído al 51 por ciento en 2019.
En junio de 2019, durante la visita del presidente chino, Xi Jinping, a Rusia ambos países llegaron a un acuerdo histórico para reemplazar el dólar con monedas nacionales para los acuerdos bilaterales.El acuerdo sino-ruso también exigía que Moscú y Pekín desarrollaran mecanismos de pago alternativos a SWIFT, dominada por Estados Unidos, para realizar transacciones comerciales en rublos y renminbi (el nombre oficial de la moneda china).
El director del Instituto de Estudios del Lejano Oriente de la Academia de Ciencias de Rusia, Alexey Maslov, dijo en una entrevista concedida a Nikkei Asian Review, el mayor diario financiero del mundo, que la tendencia de la “desdolarización” entre Rusia y China se acercaba a un “momento decisivo” que podría elevar su relación a una alianza de facto.
“La colaboración entre Rusia y China en el ámbito financiero nos dice que finalmente están encontrando los parámetros para una nueva alianza entre ellos”, dijo.
Maslov señaló que aunque muchos esperaban que esta colaboración conduzca a “una alianza militar o una alianza comercial, pero ahora la alianza se está moviendo más en la dirección bancaria y financiera, y eso es lo que puede garantizar la independencia de ambos países”.
Rusia y China no son los únicos países que se están distanciando del dólar. La desdolarización se ha convertido de hecho en una tendencia internacional, pues muchos otros países como Irán, Venezuela, Turquía, Indonesia, Malasia, Tailandia y Paquistán ya han expresado su deseo de abandonar la moneda norteamericana o reducir su uso en el comercio.