Luiz Inácio Lula da Silva en el estado de Pernambuco. Es el primero de los 6 estados que el exprimer mandatario visitará en su gira por el noreste de Brasil, la región más pobre del país, gobernada en su mayoría por opositores de Bolsonaro y tradicional bastión del socialista Partido de los Trabajadores (PT). Aunque Lula rechaza que se trata de una campaña electoral, el viaje si tiene tintes electorales.

“Estamos de regreso y trabajando para reunir la fuerza necesaria para reconstruir la democracia brasileña“, señaló el lunes el antiguo presidente de Brasil.

El exprimer mandatario cargó contra Bolsonaro, a quien acusó de autoritarismo y falta de solidaridad con las víctimas de la pandemia del coronavirus, causante de la COVID-19, en uno de los países peor golpeados por el brote.

“Bolsonaro nació de la negación y criminalización de la política. Así nacieron Mussolini, Hitler y todo el autoritarismo del mundo. Bolsonaro solo participa en actos militares. El presidente visita un cuartel, pero no va a un hospital“, manifestó Lula. 

Señaló que de ganar las elecciones de 2022 tendrá retos más complicados en comparación a 2002, cuando ganó su primer mandato. Sin embargo, se mostró convencido de que es posible reconstruir el país.

Lula lamentó que desde el golpe contra Dilma Rousseff, en 2016, los trabajadores han perdido las garantías laborales. Consideró que será posible retomar la economía y la “esperanza del país” solo si las poblaciones vulnerables se convierten en la agenda central del próximo gobierno.