Obama acordó en 2014 liberar a cinco miembros de los talibanes, la mayoría vinculada al grupo terrorista Al-Qaeda, a cambio de la liberación de Bowe Bergdahl, un sargento del Ejército de Estados Unidos, tomado como cautivo por el grupo armado en Afganistán en 2009.
El martes, tres semanas después de apoderarse de Kabul, la capital, y casi el resto de Afganistán, Talibán anunció la formación de su gabinete para un gobierno provisional, otorgando los cargos más relevantes a las figuras más destacados de los talibanes que han estado participando y luchando durante los últimos 20 años contra la coalición invasora liderada por Estados Unidos
Según la televisión afgana TOLO News, cuatro de los puestos de liderazgo en el nuevo gobierno pertenecen a Jairulá Jairjwa, Norulá Nuri, Abdul Haq Wasiq y Mohamad Fazl; todos ellos fueron liberados gracias al canje de presos acordado entre la Administración de Obama y los talibanes.
En el Ejecutivo provisional, Jairjwa se desempeñará como ministro interino de Información y Cultura, Nuri se desempeñará como ministro interino de Fronteras y Asuntos Tribales, Wasiq será director interino de Inteligencia y Fazl se desempeñará como viceministro de Defensa.
Las agencias de inteligencia de EE.UU. han determinado que Wasiq tenía vínculos cercanos con Al-Qaeda mientras se desempeñaba en el mismo puesto antes de la invasión estadounidense a Afganistán.
A finales de agosto, tras la toma de Afganistán por los talibanes, el grupo armado anunció que Mohamad Nabi Omari, otro exdetenido de la Base Naval de la Bahía de Guantánamo, con estrechos vínculos con Al-Qaeda, gobernaría la provincia oriental de Jost.