Guterres destacó que el actual sistema financiero mundial potencia las desigualdades y la inestabilidad.
Foto: Archivo/RHC
La Habana, 16 dic (RHC) El secretario general de la ONU, Antonio Guterres llamó este jueves desde Nueva York, a reformar al sistema financiero mundial, tras un 2021 marcado por la pandemia de la Covid-19, el aumento de las desigualdades, la inflación y la deuda.
Calificó a ese conjunto y a la crisis climática de una pesada carga para los países en desarrollo, por lo cual auguró un futuro complicado para la humanidad, al tiempo que sentenció que “si las cosas no mejoran, y no mejoran rápidamente, nos enfrentaremos a tiempos aún más difíciles en lo adelante”.
En sus palabras de fin de año, el titular de la ONU abordó la actual situación económica provocada la pandemia, sobre la cual dijo que las economías avanzadas movilizaron casi el 28 por ciento de su Producto Interior Bruto en su recuperación económica.
Precisó que en el caso de los países de renta media, esa cifra se redujo al 6,5 por ciento y se desplomó al 1,8 por ciento en los menos desarrollados.
Al respecto citó un estudio del Fondo Monetario Internacional que advierte que durante los próximos cinco años el crecimiento económico acumulado per cápita en el África subsahariana será un 75 por ciento menor que en el resto del planeta.
Guterres señaló cómo la inflación subió al nivel más alto de los últimos 40 años en Estados Unidos, indicador que creció también en otros lugares.
Refirió que este miércoles la Reserva Federal estadounidense adelantó que los tipos de interés subirán, lo cual supondrá una mayor presión fiscal para los países más necesitados de ayuda.
Añadió que este escenario provocará situaciones de impago en las naciones de menos ingresos que ya soportan costos de préstamo mucho más elevados.
“La necesidad de hacer frente a una deuda cada vez mayor y más cara dejará a los países en desarrollo con poco espacio fiscal para la recuperación, la creación de empleo, la acción climática, la reinvención de la educación y la recualificación y formación de los trabajadores”, significó.
El secretario general de la ONU destacó que el actual sistema financiero mundial potencia las desigualdades y la inestabilidad, mientras permite a las agencias de calificación crediticia socavar la credibilidad de las naciones en desarrollo que tienen buenas perspectivas de crecimiento y necesidades vitales de progreso.
Concluyó su reflexión económica resaltando dos fallos de gobernanza que deberían corregirse para 2022: la prevención, detección y respuesta a las pandemias, y el sistema financiero internacional. (Fuente: PL)