| Foto: EFE
Nueva York, 9 dic (RHC) El Programa Mundial de Alimentos (PMA), la Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) alertaron este jueves que casi 50 millones de personas padecerán hambre en 2023.
De acuerdo con la información, sólo en África Central y Occidental se prevé que 35 millones de personas no podrán satisfacer sus necesidades alimenticias y nutricionales básicas, incluidos 6.7 millones de niños.
De ahí que para los organismos internacionales, uno de los retos que enfrenta África es garantizar la seguridad alimentaria y una nutrición adecuada para una población en constante crecimiento.
El PMA, la FAO y el Unicef instaron a los gobiernos africanos a que aumenten el apoyo a programas de seguridad alimentaria y nutrición, y promocionen prácticas agrícolas sustentables para conjurar las consecuencias de la inestabilidad política, el cambio climático y la sobresaturación de los suelos.
A pesar de las perspectivas de buenas cosechas y la paulatina mejoría del mercado, la crisis persiste desde el Sahel hasta países costeros. Por esa razón, el PMA promueve desde 2021 estrategias de alimentación escolar para impulsar la seguridad nutricional en edades tempranas.
Según cifras publicadas por el Unicef, en África Occidental y Central más de 15 millones de niños están en riesgo de sufrir malnutrición, como consecuencia del doble impacto de la inseguridad alimentaria y la pandemia de la Covid-19.