Joseph Felix Badio. (Imagen de archivo/RHC)
Puerto Príncipe, 26 oct (RHC) La Red Nacional en Defensa de los Derechos Humanos expresó este jueves preocupación por la seguridad de uno de los principales sospechosos del asesinato del presidente Jovenel Moïse, tras su traslado hacia la Penitenciaría Nacional
El coordinador de la estructura, Pierre Espérance, recordó a la multiplataforma Alter Presse que el centro penitenciario se encuentra en una zona controlada por las alianzas de pandillas conocidas como G-9 y G-Pep.
Además, muchos funcionarios de la Administración Penitenciaria permiten la entrada a la cárcel de artículos prohibidos, entre ellos teléfonos sofisticados con los que pueden coordinar secuestros y actos violentos.
Espérance también señaló el caso del excomisario policial, Gilbert Dragon, sospechoso de formar parte del complot del magnicidio, que murió como consecuencia de la Covid-19, de acuerdo con la versión oficial, mientras que diversas organizaciones apuntan que pudo ser un homicidio.
Si Joseph Félix Badio muere al cabo de unos meses, su muerte habrá sido sin duda planificada, advirtió el defensor de derechos humanos y pidió una protección especial para el sospechoso, acusado de ser uno de los principales planificadores del asesinato del gobernante.
Deben encontrar un lugar seguro y protegido donde recluir a Badio, porque “requiere una protección especial”, aseguró.
Badio fue detenido el pasado jueves en un supermercado de esta capital, dos años después de que se emitiera una orden de captura por su supuesta relación con el magnicidio y que la Policía ofreciera una recompensa de seis millones de gourdes (casi 46 mil dólares) por información que condujera a su captura.
El también exagente de la Unidad de Lucha contra la Corrupción está acusado de asesinato, intento de asesinato y robo a mano armada.
Presuntamente fue el autor intelectual del atentado en el que Moïse recibió 12 disparos y murió como consecuencia de las heridas, mientras que su esposa, Martine Etienne, fue baleada y gravemente lesionada.
De acuerdo con una investigación de la Dirección Central de la Policía Judicial, Badio coordinó con los distintos actores implicados, entre ellos la exjueza de la Corte Suprema, Wendell Thélot Coq, el exsenador John Joel Joseph y los exsoldados colombianos que cometieron el crimen.
El exparlamentario, por su parte, se declaró culpable a inicios de este mes en Estados Unidos de haber conspirado junto a otros para proveer apoyo material y recursos para secuestrar o asesinar a una persona fuera de ese país. (Fuente:PL)