Foto tomada de Prensa Latina
La Habana, 22 may (RHC) La violencia en Haití impacta hoy de manera devastadora en la educación luego de que la inseguridad provocara el cierre de unas 900 escuelas desde mediados de 2023 en las provincias de Artibonite y Puerto Príncipe.
Las agencias de la ONU registraron más de 30 ataques en centros educativos solamente en lo que va de año, mientras los grupos armados expanden su control en barrios de la capital.
Como consecuencia, cerca de 200 mil jóvenes carecen de acceso a la educación y cuatro mil docentes permanecen desempleados.
La expansión de la inseguridad también llega a otras provincias donde el organismo no contabiliza aún el impacto.
Sin embargo, las organizaciones humanitarias apoyan con la entrega de comidas escolares que beneficiaron a casi 400 mil menores desde principios de año.
Las bandas armadas provocaron el desplazamiento interno de 362 mil haitianos, la mitad de ellos niños, según cifras de la ONU.
De acuerdo con la Organización Internacional de las Migraciones, entre el 8 de marzo y el 9 de abril unas 95 mil personas huyeron de la capital, el 60 por ciento de ellas hacia los departamentos del sur.
La ONU estima que al menos 5,5 millones de haitianos necesitarán asistencia humanitaria en 2024, lo que supone un aumento respecto a los 5,2 millones estimados antes de la escalada de los últimos meses.
El organismo advierte además de una carga desproporcionada del actual contexto en las mujeres, luego de que los índices de violación se dispararan a causa de las condiciones inseguras en muchos sitios de desplazamiento.
Como respuesta, las organizaciones humanitarias organizan actividades de prevención y sensibilización; al tiempo que identifican a los sobrevivientes y se aseguran de que reciban la atención adecuada. (Fuente: Prensa Latina)