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Tel Aviv, 1 oct (RHC) Más de un centenar de misiles iraníes penetraron este martes en el cielo israelí, mientras las baterías antiaéreas intentan interceptarlos, en medio de una escalada sin precedente tras la agresión del gobierno de Benjamin Netanyahu al Líbano.
Televisoras nacionales mostraron imágenes de los cohetes y de las baterías antimisiles israelíes que tratan de detenerlos.
Medios de prensa nacionales anunciaron el ataque iraní, dirigido supuestamente contra tres bases aéreas y una de inteligencia en represalia por la ofensiva contra Líbano y el grupo Hizbullah, aliado de Teherán.
De acuerdo con la Guardia Revolucionaria, los ataques con misiles iraníes contra la entidad sionista utilizaron ojivas de racimo, lo que provocó el fracaso del sistema Cúpula de Hierro.
En los últimos días, el Ejército israelí mató a numerosos dirigentes de la organización chiita, incluido su secretario general, Hassan Nasrallah.
El portal noticioso Ynet señaló que fueron 102 misiles, aunque el Canal 12 elevó la cifra a unos 400.
Según la primera fuente, entre los objetivos de Teherán estaban los aeropuertos israelíes de Hatzeri y Nabatin, aunque también se reportaron caídas en Tel Aviv y en las zonas de Sharon y Negev.
Habrá una dura respuesta por nuestra parte, afirmó un funcionario israelí a ese medio noticioso en la primera reacción a la operación.
Por su parte, en un comunicado, el Cuerpo de los Guardianes de la Revolución Islámica de Irán (CGRI) anunció que la incursión es una represalia al asesinato en Teherán de la máxima figura del Movimiento de Resistencia Islámica palestino, Ismail Haniyeh, y del líder del grupo libanés Hizbullah, Hassan Nasrallah, hace unos días en Beirut.
En ese último ataque también perdió la vida el brigadier Abbas Nilforushan, vicecomandante de la fuerza Al Quds, una de las principales unidades del CGRI.