Ankara, 12 ene (RHC/PL) Los servicios de seguridad turcos capturaron y deportaron hasta la fecha a 2896 extranjeros procedentes de 92 países por sospechas de posibles vínculos con el grupo terrorista Estado Islámico (EI), indica el diario Hurriyet.
El medio cita recientes declaraciones de Efkan Ala, ministro del Interior de Turquía, el cual anunció además la prohibición de entrada al territorio de su país a 35 mil 690 personas de 124 naciones que, de acuerdo con datos de inteligencia, podrían estar relacionadas con la agrupación extremista.
A fines del pasado año Ala anunció la creación de la Unidad Profesional Armada para la Seguridad de las Fronteras (Upasf) para fortalecer los controles migratorios en correspondencia con un compromiso que el gobierno turco asumió con la Unión Europea (UE) en noviembre de 2015.
En virtud de ese acuerdo, la UE aprobó la entrega a Turquía de unos tres mil doscientos millones de dólares a cambio de medidas para elevar la fortaleza de sus sistemas para reducir la criticada vulnerabilidad de los accesos a ese país, donde permanecen casi tres millones de refugiados, en su mayoría sirios.
De acuerdo con fuentes de la seguridad turca citadas por Hurriyet, gracias al arresto el 30 de diciembre en Ankara de dos miembros del EI, se ocupó información que posibilitó frustrar ataques terroristas contra seis ciudades europeas durante las celebraciones de fin de año.
Las autoridades sirias sostienen que mientras Turquía proclama su enfrentamiento al EI, en realidad tiene responsabilidad en las acciones de ese grupo y otros como Al Nusra a los cuales, según afirma Damasco, el gobierno de ese país financia, arma y entrena.
El Gobierno turco confirmó también que las 10 personas muertas debido a un atentado en Estambul son ciudadanos extranjeros y atribuyó el ataque al grupo terrorista Estado Islámico (EI).
En declaraciones a la televisión local, el primer ministro Ahmet Davutoglu afirmó que el responsable es un miembro del EI y prometió continuar con las investigaciones hasta esclarecer lo sucedido.
Asimismo, expresó sus condolencias a los familiares de los fallecidos, la mayoría de ellos alemanes.
Según medios locales, el atacante es un individuo de 27 años proveniente de Siria e identificado como Nabil Fadli.
A las 10:20 hora local, una explosión se produjo cerca de la plaza de Sultanahmet, uno de los barrios de Estambul más frecuentados por los turistas, pues en él se encuentran la Mezquita Azul y la Basílica de Santa Sofía.
Como resultado, 10 personas murieron y al menos 15 resultaron heridas, varias de ellas de gravedad.