Washington, 20 feb (rhc/PL) El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, defendió su próxima visita a Cuba como otro paso para normalizar las relaciones bilaterales.
En su tradicional discurso sabatino a la nación, Obama expresó su confianza en que su visita a La Habana, anunciada para los dìas 21 y 22 de marzo, contribuirá al avance de las metas comunes entre ambos gobiernos.
Enfatizó que hay un apoyo abrumador a la nueva relación con Cuba, la cual ha sido criticada principalmente por el ala más conservadora del Partido Republicano, en especial los pre-candidatos republicanos a la presidencia Ted Cruz y Marco Rubio.
Dijo que dialogará cordialmente con sus anfitriones cubanos temas como democracia y derechos humanos. El gobierno cubano dijo el jueves que también tiene opiniones sobre el tema con respecto a Estados Unidos.
Creo que la mejor manera de promover los intereses y valores estadounidenses, y la mejor manera de ayudar al pueblo cubano a mejorar su vida, es a través del compromiso, mediante la normalización de las relaciones entre nuestros gobiernos y el aumento de los contactos entre nuestros pueblos”, añadió el mandatario.
El presidene Obama no hizo referencia al tema del bloqueo económico, financiero y comercial contra la isla.
A continuación el mensaje íntegro del Presidente:
Buenos días a todo el mundo. Esta semana es oficial. Voy a Cuba.
Cuando Michelle y yo vayamos a La Habana el mes que viene, será la primera visita de un presidente estadounidense a Cuba en 90 años. Es una ampliación de la decisión que hice hace más de un año de comenzar un nuevo capítulo de nuestra relación con el pueblo cubano.
Creo que es la mejor manera de avanzar los intereses y los valores de los Estados Unidos, y que la mejor manera de ayudar al pueblo cubano a mejorar sus vidas es a través de “engagement”, normalizando las relaciones entre nuestros gobiernos y aumentando los contactos entre los dos pueblos. Siempre he dicho que el cambio no le llegará a Cuba de un día para otro. Pero mientras que Cuba se abre, eso creará más oportunidades y recursos para los cubanos de a pié. Y estamos viendo algún progreso.
Hoy, la bandera estadounidense vuela sobre nuestra embajada en La Habana, y nuestros diplomáticos están ahora interactuando más ampliamente con el pueblo cubano. Más estadounidenses visitan a Cuba que en cualquier momento durante los últimos 50 años: familias cubanoestadounidenses, estudiantes estadounidenses, maestras, voluntarios humanitarios, comunidades religiosas—todos estableciendo nuevos lazos y amistidades que acercan a nuestros países. Y cuando resuman los vuelos y ferries directos, nuestros ciudadanos tendrán la oportunidad de viajar y trabajar juntos y conocernos.
Epresas estadounidenses comienzan a comerciar con Cuba, ayudarla a desarrollar empresas privadas, y dándoles a los empresarios cubanos nuevas oportunidades. Con los nuevos hotspots (puntos de acceso) de Wi-Fi, más cubanos están en línea para obtener información del mundo. En ambos países hay apoyo abrumador para esta nueva relación. Y en Cuba, por la primera vez en medio siglo, hay esperanza para un diferente futuro, especialmente para los jóvenes cubanos que tienen tanto talento y potencial extraordinario esperando para ser liberado.
Mi visita será una oportunidad para seguir avanzando. Me reuniré con el Presidente Castro para conversar sobre como seguir normalizando las relaciones, incluyendo facilitando el comercio y haciendo más fácil para que los cubanos tengan acceso al internet y monten sus propias empresas. Como hice cuando me reuní con el Presidente Castro el año pasado, le hablaré francamente sobre nuestras serias diferencias con el gobierno cubano, incluyendo sobre la democracia y los derechos humanos. Reafirmaré que los Estados Unidos continuará defendiendo los valores universales como la libertad de expresión, asamblea y religión.
Tendré reuniones con miembros de la sociedad civil cubana: hombres y mujeres valientes quienes le dan voz a las aspiraciones del pueblo cubano. Me reuniré con empresarios cubanos para aprender como los podemos ayudar a montar nuevas empresas. Y hablaré directamente con el pueblo cubano sobre los valores que compartimos y como podemos ser socios mientras que trabajamos para el futuro que quieren.
Aún estamos en los primeros días de nuestra nueva relación con el pueblo cubano. Es una transformación que tomará tiempo. Pero estoy enfocado en el futuro, y confío que mi visita avanzará las metas que nos guian: promover los intereses y valores estadounidenses y un mejor futuro para el pueblo cubano, un futuro de más libertad y más oportunidad.
Gracias a todos, y al pueblo cubano. Nos vemos en La Habana