N. Unidas, 1 jun (RHC) El secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, y el Consejo de Seguridad del órgano mundial condenaron de manera enérgica el ataque el cual causó un casco azul chino muerto en Mali.
En declaraciones separadas, transmitieron Ban Ki-Moon y el organismo internacional sus condolencias al gobierno de China y demandaron rápidas acciones las cuales lleven ante la justicia a los responsables de la nueva acción violenta contra la Misión de Estabilización de Naciones Unidas en el país africano (Minusma).
Un coche bomba explotó este 31 de mayo en un campamento de la fuerza de cascos azules en la región de Gao, en el tenso territorio del Azawad, donde pese a los acuerdos de paz continúa la violencia, atribuida fundamentalmente a grupos terroristas.
Varios integrantes de la Minusma sufrieron heridas durante el ataque a la instalación, mientras que en otra parte de la ciudad, un contratista francés al servicio de la ONU y dos guardias de seguridad malienses perdieron la vida en un atentado.