La Habana, 8 (RHC) Los trabajadores que atienden la Enseñanza Especial en la provincia cubana de Matanzas, realzan los indicadores del desarrollo cognitivo de alumnos, lo que permite una mayor inserción de estos niños discapacidades físico-motoras.
De manera gratuita y como uno de los logros de la Revolución, la inclusión de los pequeños con necesidades educativas diversas en esta región, así como en el resto de la nación se constata con la participación social comunitaria que protagonizan los niños que nececitan la enseñanza especializada.
Un reflejo de estos éxitos en Matanzas se constata en la escuela Rubén Martínez Villena, en Jagüey Grande, que garantiza a 100 niños el desarrollo de habilidades en el estudio y su adaptación al colectivo.
El bloqueo no ha podido menguar los desvelos en esos centros, que cuentan con profesionales competentes y recursos indispensables para lograr mejoras en las capacidades de aprendizaje de los alumnos.