Londres, 5 oct (RHC) Activistas de la solidaridad con Venezuela, Cuba y Nicaragua en el Reino Unido denunciaron la arremetida de Estados Unidos y la élite corporativa internacional contra los movimientos y gobiernos progresistas en América Latina.
La administración del presidente estadounidense, Donald Trump, está intensificando sus ataques en todos los frentes, en un intento de decapitar a la izquierda latinoamericana, advirtió Fiona Edwards, de la Campaña de Solidaridad con Venezuela, en la reunión anual de esa organización.
El evento, diseñado para pasar revista al trabajo realizado por los activistas y trazar los planes para el año próximo, también devino foro de denuncia contra la creciente hostilidad de Washington hacia Caracas, La Habana y Managua, cuyos gobiernos fueron tildados por el ahora exsecretario norteamericano de Seguridad Nacional John Bolton como el 'eje del mal latinoamericano'.
La fundadora de la coalición británica Stop the War Lindsey German alertó sobre los peligros que enfrenta los pueblos de esa región con la llegada el poder de individuos como el brasileño Jair Bolsonaro, y de otros representantes de la derecha respaldados por Trump.
Ken Livingston, quien se precia de haber sido anfitrión del fallecido mandatario venezolano Hugo Chávez en la época en que fue alcalde de Londres (2000-2008), afirmó, por su parte, que detrás de la política agresiva de Estados Unidos está el interés de la élite corporativa internacional en apoderarse del petróleo venezolano.
No tiene nada que ver con la defensa de la democracia, como dicen, sino con el petróleo, sentenció Livingston, quien exhortó a las fuerzas y sindicatos progresistas del mundo a estar consciente de que existe una campaña mediática para ocultar el verdadero motivo de los ataques contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro.
En el acto intervino también el exconsul de Ecuador en el Reino Unido Fidel Narváez, quien denunció la traición del presidente Lenin Moreno al movimiento que lo llevó al poder en 2017, y detalló varias de las medidas tomadas por el mandatario para desmontar la Revolución Ciudadana iniciada por Rafael Correa 10 años atrás.
Las embajadoras de Nicaragua y Cuba, Guissell Morales-Echavery y Teresita Vicente, respectivamente, se refirieron al incremento de la hostilidad de Washington hacia sus países, mediante la imposición de nuevas sanciones, al tiempo que ratificaron su solidaridad con Venezuela.
A su turno, la representante del gobierno venezolano ante el Reino Unido, Rocío Maneiro, vinculó la hostilidad de Estados Unidos con la decisión de esos tres países de fundar a principios de este siglo la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de América Latina y el Caribe (ALBA).
Somos una amenaza porque nos atrevimos a proponer un modelo de cooperación diferente, afirmó la diplomática, en alusión a los principios de solidaridad, complementariedad, cooperación y respeto a la soberanía que inspiraron el proyecto.
El secretario ejecutivo de la Campaña de Solidaridad con Venezuela, Francisco Domínguez, instó a los miembros de la organización a presionar a sus representantes ante el Parlamento británico para que denuncien la ofensiva estadounidense contra Venezuela y los gobiernos progresistas de América Latina. (Fuente: PL)