La Habana, 16 jul (RHC) El director general para Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, Carlos Fernández de Cossío rechazó los persistentes intentos de la administración Trump de impedir la cooperación médica de la isla con países que piden ayuda para enfrentar la pandemia de Covid-19.
Mientras el gobierno norteamericano parece poco dispuesto o incapaz de proteger a sus ciudadanos del azote de la Covid-19, encuentra tiempo y compromete recursos para amenazar países que piden la cooperación médica de Cuba en su lucha legítima contra la pandemia, señaló en Twitter.
A los reclamos del se sumó, en la misma plataforma digital, la representante permanente alterna de la isla ante Naciones Unidas, Ana Silvia Rodríguez.
El acceso a la salud es un derecho humano y 'Cuba contribuye al disfrute de este derecho #CubaSalvaVidas', expresó la embajadora.
Todos los trabajadores de salud cubanos que viajaron como parte de una misión para luchar y controlar la Covid-19, lo hicieron por pedido expreso de las autoridades de los países donde estaban ofreciendo sus servicios, así como aquellos que ya brindaban asistencia médica antes de la pandemia, señaló Rodríguez en un mensaje que compartió este jueves en Twitter.
Washington desarrolla, casi desde el inicio de la pandemia, una campaña contra la colaboración médica cubana e intenta desacreditar los esfuerzos de las autoridades y los profesionales sanitarios de la nación caribeña en la lucha contra la Covid-19.
El canciller cubano, Bruno Rodríguez, acusó a Estados Unidos de criminalizar la cooperación internacional que brinda la isla para enfrentar la pandemia de Covid-19.
Lo hace por motivos políticos, subrayó, pues a la Casa Blanca le resultan ajenos el humanismo y la solidaridad: el gobierno de Estados Unidos no repara en dañar esfuerzos de terceros países en el enfrentamiento a la pandemia con tal de atacar a Cuba.
El mes pasado, el secretario norteamericano de Estado, Mike Pompeo, presentó el informe de Estados Unidos sobre la trata de personas, el cual incluyó a Cuba en la peor ubicación (nivel tres) y calificó a las misiones médicas de la mayor de las Antillas como trabajo forzado.
Tal anuncio se hizo en el contexto de una intensa campaña de la administración Trump contra la colaboración del personal sanitario de Cuba en el mundo, alegando supuestas violaciones en su tratamiento y pago.
A pesar de ello, numerosos gobiernos solicitan la ayuda de la nación caribeña para hacer frente a la pandemia de Covid-19. Hasta la fecha, brigadas de colaboradores médicos cubanos han viajado a más de 30 países de Europa, América, África y Medio Oriente.