El dignatario delineó cinco elementos básicos para revertir la actual situación epidemiológica en La Habana. Foto: Archivo
La Habana, 29 ago (RHC) El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, encabezó este sábado la reunión del Grupo Temporal de Trabajo del Gobierno para el control de la COVID-19, en la que se analizó la situación en La Habana, a pocas horas de que se implementen nuevas medidas restrictivas para frenar el rebrote de la enfermedad
“Estoy convencido de que con la participación protagónica de la mayor parte de la población, unida a la labor y el esfuerzo gubernamental e institucional, apoyando las medidas, evitando que unos pocos indolentes atenten contra lo que nos debe conducir a un mejor estado con relación a la pandemia, podemos vencer de una manera más rápida”, enfatizó el Jefe de Estado.
“De la misma manera en que en otros momentos hemos convocado a una Fuerza, Cuba; hoy, como parte de ella, necesitamos una Fuerza, Habana, seguro de que podremos y venceremos este rebrote. Con esas expectativas tenemos que trabajar intensamente a partir de ahora mismo”, indicó.
En la capital de país están ingresados 487 de los 556 pacientes activos que tiene en estos momentos la nación. Además mantiene seis eventos abiertos de transmisión local de la enfermedad y 167 focos en sus 15 municipios. Asimismo, de los 49 casos autóctonos reportados este sábado en el territorio nacional, 45 corresponden a La Habana.
Díaz-Canel señaló que esta situación ha llevado a la necesidad de instrumentar medidas restrictivas para, en el menor tiempo posible, cerrar eventos y focos; cortar la transmisión; y pasar a una situación más favorable en el enfrentamiento a la pandemia.
Reconoció que siempre que se aplican medidas restrictivas, como en el primer momento en que se manifestó la epidemia, se exigen sacrificios sociales, familiares y personales, que impactan en la vida de la nación y en el desempeño de la actividad económica-social.
“El éxito que podamos tener no depende de la declaración de las medidas por sí mismas, el elemento fundamental es la participación ciudadana, el protagonismo de nuestra población en llevar adelante, de manera eficaz, el cumplimiento de estas medidas”, manifestó el dignatario.
Enfatizó en que esas decisiones “tienen que ser aplicadas con rigor, con severidad, para lograr los deseos que compartimos entre todos y que la propia población sugirió”.
El presidente de la República añadió que pese al paso de la tormenta tropical Laura se mantienen el trabajo y la vida de los cubanos, en particular de la capital, en las condiciones de un rebrote de la epidemia, que todavía no ha sido totalmente controlado.
Recordó que después del azote del meteoro se levantó un enorme, rápido e intenso esfuerzo que ha permitido que en pocos días estemos recuperados de las afectaciones fundamentales en los servicios a la población.
Imagen ilustrativa tomada de Archivo
Díaz-Canel consideró que, independientemente de que el evento meteorológico haya tenido más o menos envergadura, dejó daños en un porciento grande del sistema eléctrico, provocó afectaciones en alrededor de 2 000 mil viviendas, interrumpió comunicaciones en algunos lugares y perjudicó la agricultura.
En medio del enfrentamiento a la COVID-19, apuntó, “volvieron a salir una vez más, en toda su magnitud, los valores de solidaridad, de cooperación, de decisión y de valentía del pueblo cubano, que es también una expresión de compromiso con la Revolución”.
Afirmó que la pandemia no ha podido resquebrajar esos valores y sentimientos. “La gente, en medio de las dificultades, tiene capacidad para sobreponerse, para enfrentar situaciones y superarlas. Eso nos da confianza en que también este rebrote lo vamos a superar”.
En la reunión, el Ministerio de Salud Pública ofreció una información detallada de la pandemia, y rindieron cuenta los gobernadores de las provincias de La Habana, Artemisa, Granma, Santiago de Cuba y Guantánamo.
Cinco elementos básicos delineó Díaz-Canel en el encuentro de este sábado con el Grupo Temporal de Trabajo: menos movilidad; más aislamiento; más severidad en el tratamiento a los focos y los eventos; más rapidez en el proceso de aislar a los sospechosos, a los contactos y también a los contactos de los contactos; y revisar los protocolos de tratamiento para reducir los días de positividad en un grupo de pacientes hospitalizados con la COVID-19.
“Sumado a ello está nuestro comportamiento responsable. La mayoría está de acuerdo en que tenemos que superar la indolencia de unos pocos para que todos estemos mejor”, aseveró el presidente de Cuba. (Fuente: Radio Reloj)