Se acometerán acciones para contener el alza de los precios, aseguró Merci Bolaños, ministra de Finanzas y Precios.
La Habana, 13 dic (RHC) Cuba adoptará medidas desde el 1 de enero contra la posible inflación derivada del ordenamiento monetario, un proceso que acapara la atención de los cubanos.
Con la llegada del nuevo año desaparecerá el peso cubano convertible (CUC) y solamente podrá utilizarse el peso cubano (CUP) para todas las operaciones en la isla, con una tasa de cambio respecto al dólar de 24 x 1.
Según explicó la ministra de Finanzas y Precios, Meisi Bolaños, habrá un aumento de los precios porque a partir de la unificación monetaria y cambiaria la nueva tasa de un dólar contra 24 pesos impactará en el sector productivo, en los productos importados, y por tanto en los costos.
Ante ese escenario, la titular mencionó acciones para contener el alza de los precios, como la centralización de las tarifas de producciones y servicios de carácter transversal y de alto impacto.
Ese es el caso del combustible, el agua, el cemento y el azúcar, acotó la titular al intervenir este sábado en el programa Mesa Redonda de la televisión nacional.
Por otro lado, refirió que las elaboraciones nacionales no podrán costar más que las importadas para poder contribuir al encadenamiento productivo y a la estabilidad macroeconómica.
Igualmente, habrá límites de crecimiento de la cantidad de dinero necesaria para adquirir bienes o servicios mayoristas descentralizados y de las tasas de márgenes comerciales con el objetivo de preservar la ganancia de la reforma salarial prevista, apuntó la funcionaria.
Precisamente junto con la unificación monetaria y cambiaria y la eliminación de los subsidios, habrá un incremento de los ingresos de los trabajadores, pensionados y otros beneficiarios de la seguridad social.
La ministra de Trabajo y Seguridad Social, Marta Elena Feitó, declaró que reajustaron la escala salarial de 32 grupos y su jerarquización en aras de estimular el interés por el trabajo, la promoción a cargos de dirección y para eliminar la pirámide invertida de ingresos existente en la sociedad cubana.
Para ello tuvieron en cuenta la preparación profesional, la intensidad de la función y la responsabilidad de cada cargo.
De esa forma, el salario mínimo en Cuba quedó fijado en dos mil 100 pesos, tanto para el sector presupuestado como para el empresarial.
Según Feitó, esa cifra se forma por el valor de la canasta básica de bienes y servicios (mil 528 pesos) multiplicada por 1,3 y sumada la contribución del cinco por ciento a la seguridad social.
Respecto a los un millón 700 mil pensionados del país afirmó que todos recibirán mensualmente un beneficio de al menos el valor de la canasta básica de bienes y servicios que es mil 528.
Por su parte, los 119 mil hogares que reciben ayuda financiera de la seguridad social tendrán también un reajuste de sus prestaciones en sintonía con los nuevos precios a partir del 2021, informó la ministra de Trabajo. (Fuente: PL)