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Lima, 2 jun (RHC) El reconocimiento de los peruanos por la solidaridad de Cuba y el orgullo cubano por brindarla destacaron en un foro virtual recordatorio del aniversario 51 del gran terremoto de 1970, cuando nuestro país dio inmediata asistencia.
La actividad recordó la tragedia que causó 75 mil muertes y 380 mil heridos y afectó principalmente a la región de Áncash, a cuya devastada capital, Huaraz, llegó la primera misión médica cubana.
Participaron el representante de la embajada de Cuba en Perú Reynier del Calvo y dirigentes sociales, profesionales y testigos de la catástrofe.
El diplomático dijo que los cubanos recuerdan aquellos días con solemnidad pero también con orgullo, porque la nación caribeña fue parte de la ola de solidaridad que ayudó a Perú a sobreponerse y salir adelante.
Destacó la gratitud del pueblo de Áncash (región al norte de Lima) por 'aquellas páginas de solidaridad escritas por los cubanos, cuando ni siquiera relaciones diplomáticas existían entre ambos países'.
Agregó que en Áncash se recuerda también a Elpidio Berovides, jefe de la brigada de constructores cubanos llegados para edificar una red de hospitales en esa región y las colindantes, quien falleció en un accidente de carretera.
'Cómo no recordar al Comandante en Jefe Fidel Castro, tendido en una camilla, donando su sangre, gesto altruista con el que convocó a los cubanos a dar su aporte voluntario de 150 mil bolsas de sangre y plasma', expresó.
En el foro se recordó la solidaridad médica cubana tras el terremoto de Pisco de 2007, las inundaciones de 2017 y el año pasado en la lucha contra la Covid-19.
'Y no duden que, si otra tragedia afectara al Perú, en las circunstancias que sea, los cubanos diremos presente una vez más', pues esa es la conducta característica de la revolución cubana, dijo Del Calvo.
José Orellana, miembro de la Casa de la Amistad Perú-Cuba de Áncash, relató su experiencia durante el terremoto y el impacto de la ayuda médica cubana.
El vicepresidente de la Asociación Peruana de Graduados en Cuba, Mario Izquierdo, destacó el altruismo de los médicos cubanos que dejó huellas en los profesionales formados en la Isla.
El médico Nelson Pacheco, relató anécdotas de la construcción de los hospitales, en especial al de la ciudad de Recuay, que sigue en pie y es un símbolo de la solidaridad entre ambos pueblos.
Serafín Mondragón, coordinador de las Casas de la Amistad de Lima, resaltó la graduación en Cuba de más de dos mil médicos peruanos y condenó el bloqueo norteamericano a la Isla.
Nicolás Aguilar, presidente de la Coordinadora Nacional de Solidaridad con Cuba, llamó a sumarse a la campaña de donación de jeringas para la vacunación contra la COVID-19. 'Hay que devolver con solidaridad toda la ayuda que nos ha brindado Cuba', expresó. (Fuente: Prensa Latina).