Moscú, 15 jul (RHC) La portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, denunció la doble política que aplica hoy el Gobierno de Estados Unidos con respecto a las acciones desestabilizadoras del pasado 11 de julio en Cuba.
'La Casa Blanca dijo que las últimas protestas en Cuba afectarán la futura política de Estados Unidos hacia este país. Pero, ¿qué pasa con las últimas protestas en Francia? ¿No las reflejarán?', escribió la representante del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia en su canal de Telegram.
La diplomática llamó la atención sobre las manifestaciones de este miércoles en diferentes ciudades francesas, incluyendo París, donde se registraron algunos choques en la plaza de la República con las fuerzas del orden, que utilizaron gases lacrimógenos.
'Hay tanto lío en las calles de París: barricadas, cañones de agua, gases lacrimógenos, incendios de coches. Si no fuera por los medios técnicos modernos, el verdadero Día de la Bastilla. ¿No puede verlo desde la Casa Blanca?', advirtió Zajárova.
Durante los últimos días, las autoridades cubanas denunciaron la vinculación de Estados Unidos con los acontecimientos en la isla y el papel del bloqueo de Washington en los graves problemas económicos que enfrenta el país.
El pasado 13 de julio, el viceministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Riabkov, subrayó la 'inadmisibilidad de injerencias externas y otras acciones destructivas que están cargadas de desestabilización para Cuba'.
Durante la jornada dominical numerosos cubanos salieron a las calles para expresar su respaldo a la Revolución, en respuesta a actos públicos de descontento ocurridos ese día en diferentes puntos de la geografía nacional, instigados a través de las redes sociales.
El presidente cubano Miguel Díaz-Canel, en comparecencia televisiva, rechazó la actuación de quienes alentaron las revueltas y los calificó de oportunismo y doble moral, pues aprovecharon las difíciles circunstancias del pueblo debido a la pandemia de Covid-19 y el recrudecido bloqueo económico de Estados Unidos.
No quieren el bienestar de la gente, denunció el primer mandatario, y agregó que incitar a ese tipo de desorden en las circunstancias excepcionales del país es una perversidad.
(PL)