Fotos: Roberto Díaz Martorell. ACN.

La Habana, 13 ene (RHC) El vice primer ministro cubano Jorge Luis Tapia Fonseca, intercambió este viernes con productores de alimento, colofón de la visita de trabajo a Isla de la Juventud, que tuvo entre sus propósitos chequear el comportamiento de los indicadores económicos durante el pasado año y proyecciones para 2023.

Gracias al diálogo con Claudia Fonseca Despaigne (técnico veterinaria) y Roberto Martín González, administrador de la unidad empresarial de base de ganado menor La Esperanza, el alto funcionario conoció sobre las potencialidades de ese centro multiplicador cunícola para convertirse en Colectivo Laboral amparado en la Resolución 600/2021 a fin de optimizar la fuerza laboral.

En ese propósito, los exhortó a desterrar subjetividades que permitan a la postre hacer un uso eficiente de la infraestructura de esa actividad pecuaria de relevancia económica para el territorio e importante en la diversificación de la dieta de los más de 83 mil residentes en el municipio especial.

Durante la visita al campesino usufructuario Euclides Beirut, el vice primer ministro constató in situ el buen desarrollo vegetativo de la papa estatal en las 19,5 hectáreas (ha) bajo su responsabilidad.

Después de 12 años de ausencia de ese preciado tubérculo en la campiña pinera, se siembran por segundo año consecutivo 30 ha destinadas al balance nacional por contar con riego tecnificado y paquete tecnológico, apuntó Omar Álvarez, especialista principal del grupo de producción de la empresa agroindustrial.

Asimismo, el ingeniero elogió la calidad de esa solanácea en otras cinco ha, plantadas de manera ecológica, por un grupo selecto de campesinos, que recibe asesoría de profesores de la universidad local.

El intercambio estuvo antecedido por el chequeo sobre el comportamiento de los indicadores económicos durante el pasado año, aún distantes de los resultados esperados, y las proyecciones para 2023, con prioridad en el autoabastecimiento territorial, a partir del encadenamiento y la aplicación de la ciencia y la innovación, como pilares estratégicos.

A eso se suman, la organización de los procesos; la comunicación; la correcta contratación; la competencia de los cuadros de dirección; la creación de capacidades; la atención a barrios y familias en condiciones de vulnerabilidad; el perfeccionamiento del comercio minorista; la soberanía alimentaria y educación nutricional (como meta de desarrollo) y la concreción de proyectos de desarrollo local.

(Fuente: ACN).