José Bodes Gómez. (Foto:PL)
La Habana, 28 sep (RHC) Con la partida física este sábado del destacado periodista José Bodes Gómez, la Agencia Prensa Latina y el gremio cubano pierden a uno de sus más fieles representantes.
Bodes Gómez, nacido en 1935, se inició en el mundo de las letras a mediados de la década de 1950, escribiendo críticas de cine para el Diario Nacional de La Habana, donde trabajó como redactor y titulista, cubriendo el turno nocturno, de 7 de la noche a 1 de la madrugada.
Tras el triunfo de la Revolución en 1959, se sumergió de lleno en el periodismo y en diciembre de ese mismo año ingresó a la Agencia Informativa Latinoamericana como redactor nocturno.
Allí tuvo la oportunidad de conocer al primer director de Prensa Latina, Jorge Ricardo Masetti, a quien consideraba una leyenda viva por haber estado en la Sierra Maestra y entrevistado a Fidel Castro y al Che Guevara.
Su hoja de vida estuvo marcada por numerosas experiencias como corresponsal en Chile, Rusia y Argentina, donde en ocasiones su vida corrió peligro debido a las complicadas situaciones políticas y su colaboración fue decisiva para transmitir a La Habana lo que pasaba en la región.
Precisamente en Buenos Aires, Bodes Gómez experimentó en primera persona el aumento de la hostilidad hacia la Embajada de Cuba y los ciudadanos cubanos tras el golpe militar de 1976.
«A mi me pusieron un seguimiento de 24 horas a dondequiera que fuera en Buenos Aires. Si visitaba alguna familia amiga, después que me iba la interrogaban agentes de la policía. Mi esposa y mis hijos habían tenido que regresar a Cuba por el peligro que corríamos los cubanos», según confesó en una entrevista.
A pesar de los peligros, su compromiso con Prensa Latina no le permitió claudicar y solo abandonó Argentina hasta diciembre de 1977, cuando le dieron la visa a su relevo.
Otros de los episodios periodísticos que recordaba especialmente fue su cobertura en 1979 a la sesión de la Asamblea General de la ONU, en la que habló Fidel Castro como presidente de Cuba y del Movimiento de Países No Alineados.
«Cuando llegué a la sala de prensa todavía Fidel no había terminado su discurso y me impresionó grandemente la atención, puedo decir unánime, conque los periodistas de muchos medios en el mundo escuchaban a nuestro Comandante en Jefe», señaló.
Además de su labor excepcional en el periodismo, Bodes Gómez es considerado un maestro de generaciones en Prensa Latina. Hasta su deceso, el periodista más antiguo de la Agencia continuó transmitiendo su sapiencia a los más jóvenes.
Fue merecedor de varias distinciones y publicó también diversos libros, entre ellos Desafío a la desinformación, Mate y ron, El estilo cablegráfico, este último esencial para los estudiantes de periodismo.