Luanda, 30 mar (RHC-PL) Cuba entregó a Angola 17 materiales sobre la participación de sus mejores hijos en la guerra por la independencia y defensa de la soberanía de ese país africano.

Los materiales que entregamos son testimonio de esta historia común que nos enorgullece, dijo la embajadora cubana Gisela García en el acto de donación realizado en el capitalino Museo Nacional de Historia Militar, que contó con la presencia del ministro angoleño de Defensa, Joao Lourenzo.

Recordó que cientos de miles de colaboradores civiles cubanos estuvieron y están en Angola brindando su contribución desde los primeros y más difíciles momentos de la joven República, de los cuales dos mil 77 perdieron su vida en la lucha por la defensa de la independencia e integridad territorial de esa tierra africana.

La diplomática cubana formuló un reconocimiento especial al presidente José Eduardo dos Santos y a Lourenzo “por las siempre renovadoras muestras de agradecimiento” a Cuba y su contribución a la independencia de Angola.

Citó al Héroe Nacional cubano José Martí cuando dijo: “de amar la glorias pasadas, se sacan fuerzas para adquirir las glorias nuevas”.

Un momento emotivo en el acto ocurrió cuando la embajadora entregó a Lourenzo, en representación simbólica de los objetos donados, la brújula marca Silva que empleó el comandante Raúl Díaz Argüelles durante su campaña militar en Angola, donde cayó en combate el 11 de diciembre de 1975.

Para el ministro angoleño, la ceremonia estuvo “cargada de gran simbolismo histórico. El Museo quedará rico con la entrega de algunos objetos que testimonian la contribución del pueblo cubano en la independencia y soberanía nacional”.

Reclamó que la juventud angoleña “conociera de cuánto el pueblo de Cuba ayudó a Angola, apoyo que se prolongó en el tiempo y se mantiene hasta nuestros días en el sector de la medicina, la salud y en la reconstrucción nacional”.

Entre los materiales entregados figura una carta remitida a los combatientes cubanos que cumplían misión internacionalista en este país, firmada por el Comandante en Jefe Fidel Castro y el general de Ejército Raúl Castro en el “Año 30 de la Revolución”.

De igual manera una foto tirada a la pared en el que aparece el texto: “los MIG-23 nos partieron el corazón”, escrito por un soldado sudafricano en la guarnición Calueque, el 27 de junio de 1988.

Aparece asimismo entre los objetos un mapa de la “Batalla de Cuito Cuanavale” y una bandera cubana que llegó a ese combate con el refuerzo cubano para detener la última escalada sudafricana.

La enseña acompañó además a la guardia en honor a los combatientes cubanos caídos, estuvo en la entrega de medallas y en la marcha desde Cuito hasta Menongue por la “Operación Victoria”.