La Habana, 19 abr (RHC) Justo en un escenario donde se cuece la hoja de ruta de la nación cu­bana llega la feliz idea de retomar Cuba Socialista. la pu­bli­cación de esta revista coadyuva a la construcción del país, el porvenir de sus hombres y continúa la batalla de pensamiento a la cual convidó Fidel desde los años más difíciles.

“Lo demanda el avance de la Re­volución y el progreso de la unidad de todas las fuerzas y elementos re­volucionarios”. Así se puede leer en las palabras de Fidel Castro al surgir Cu­ba Socialista en el año 1961, y pareciera que es hoy cuando un nuevo consejo editorial nos invitara a po­nerse en apretada fila para sumar necesarios compromisos con el fu­turo y la cau­sa del pueblo.

Presentada a la prensa en el Pala­cio de Convenciones de La Habana,  la revista cuatrimestral teórica y política del Co­mité Central del Partido,  reaparece en su cuarta épo­ca con un número especial dedicado al 7mo. Congreso del Partido, con la pretensión de convertirse en un es­pa­cio teórico para la exposición y el debate de ideas, tal y como enuncian las palabras de presentación de la primera edición.

Surge la publicación, hace 55 años, como órgano teórico del Par­tido, casi inmediatamente después de haber vencido Cuba la invasión mercenaria en las arenas de Playa Girón y haberse declarado el carácter socialista de la Revolución, co­mentó a la prensa su director En­rique Ubieta.  

Era un órgano para discutir los problemas teóricos que enfrentaba el país —comentó— cuando se em­pe­zaba a construir la Revolución. El primer consejo de dirección era de lujo, fue una época irrepetible, estaba el Comandante en Jefe Fidel Cas­tro Ruz junto a Carlos Rafael Ro­drí­guez, Osvaldo Dorticós Torra­do, Blas Roca Calderío y Fabio Grobart.

Luego de interrumpirse en el año 1967, la revista tuvo una segunda etapa a partir del Segundo Con­greso del Partido, y el tercer periodo de vida desde 1996 y hasta el 2010, cuando la discusión en torno a los Li­neamientos de la Política Eco­nó­mica y Social del Partido y la Re­vo­lución, impusieron una pausa a partir de que la academia no logró asimilar el ritmo con el que estaban su­cediendo los cambios, aseguró Ubieta.

“El primer número especial, de­dicado al Congreso, in­cluye un recorrido por el pensamiento revolucionario cubano des­de los orígenes, desde Céspedes, Ana Be­tancourt, el Manifiesto de Mon­te­cris­ti, cartas de Maceo y Gó­mez, has­ta documentos más actuales, como frag­mentos de La historia me absolverá”, expresó el director de la revista.

Sobre la composición del Con­sejo Editorial, dijo que lo integran importantes personalidades, pero ade­más, para hacerlo más numeroso, contará con el apoyo de instituciones y personas que han aportado sus sugerencias. “Nos nutriremos de todo el sistema científico e intelectual cubano. Quisiéramos invitar por esta vía a la vanguardia intelectual y política del país”.

Con una tirada de 10 000 ejemplares, Cuba Socialista circulará en las bibliotecas públicas y de las universidades cubanas, y estará a disposición además del público general, sobre todo los núcleos del Par­tido, comités municipales y provinciales. De hecho, en palabras de su director, seguramente habrá un pú­blico especializado, pero la intención es “llegar a muchas más personas, sin que eso signifique dejar de hacer una revista rigurosa”.