Pekín, 30 mar (RHC) El codiciado pangolín se baraja hoy como la posible fuente natural del coronavirus SARS-CoV-2, causante de la neumonía Covid-19, luego de que científicos de China y Australia descubrieron patógenos similares en ejemplares contrabandeados aquí desde Malasia.
Anteriores investigaciones señalaron a ese y otros animales muy demandados como los potenciales intermediarios que pasaron a los humanos el mortífero virus, presumiblemente también surgido en murciélagos.
Pero según el diario China Daily, un nuevo estudio analizó por separado muestras de pangolines confiscados en los períodos agosto de 2017-enero de 2018 y de mayo a julio de 2018, y en muchas de ellas encontraron distintos tipos de coronavirus, incluso algunos desconocidos.
La pesquisa halló que la secuencia genética de dichos microorganismos es entre 85,5 y 92,4 por ciento idéntica a la de la variante que provoca la Covid-19.
Con esos resultados preliminares, los autores urgieron extremar la vigilancia sobre los hábitats, una mayor protección a los pangolines en China y el Sudeste Asiático, así como la prohibición total a su venta en mercados de animales salvajes.
Indicaron que continuarán las investigaciones en ellos para entender la naturaleza de los coronavirus y así prevenir en el futuro el surgimiento de pandemias con origen zoonótico como la actual.
El estudio lo desarrollan expertos de las universidades de Shantou, Hong Kong, de Tecnología Química de Beijing, la Médica de la región autónoma Zhuang de Guangxi y la Sydney de Australia.
Las escamas del pangolín son altamente cotizadas en la medicina tradicional china por sus supuestos beneficios para tratar la artritis, estimular la lactancia materna e incrementar la virilidad masculina.
La Asamblea Popular Nacional del gigante asiático (Parlamento) prohibió el mes pasado el comercio ilegal de animales salvajes y el hábito de consumirlos, como medida de protección sanitaria y en respuesta a crecientes llamados de ecologistas, juristas y medios de prensa contra un negocio, vinculado con la Covid-19.
En enero científicos hallaron al virus SARS-CoV-2 en un mercado de mariscos y venta de distintas especies vivas de Wuhan -el epicentro de la enfermedad en China- y las investigaciones arrojaron que es 90 por ciento similar al encontrado en murciélagos de la provincia de Zhejiang.
Poco antes se señaló al alto consumo en la ciudad de carne cruda y partes de animales exóticos como el origen de la epidemia y desde entonces se puso bajo la lupa el pobre cumplimiento de las normas en ese lucrativo y milenario negocio. (Fuente: Prensa Latina).