Pueblo reconocido

Editado por Maite González Martínez
2021-07-06 03:33:59

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Elisa Loncón / ABC

Por: Guillermo Alvarado

No cabe ninguna duda de que lo más destacado de la primera sesión de la Convención Constitucional de Chile, celebrada el domingo reciente, fue la elección como presidenta de esa entidad de la académica y activista mapuche Elisa Loncón Atileo, lo que es un reconocimiento histórico a ese pueblo.

Durante más de 500 años las comunidades indígenas de la nación austral fueron exterminadas o desconocidas, primero por los conquistadores españoles y a partir de 1818 por el recién nacido Estado chileno, caracterizado por un racismo extremo.

El territorio del pueblo mapuche fue invadido por el ejército a mediados del siglo XIX y los sobrevivientes resultaron entregados, junto a las tierras, a colonos que establecieron latifundios en esa zona.

Tras el golpe de Estado perpetrado en 1973 por Augusto Pinochet, las haciendas se convirtieron en empresas forestales que explotaron los recursos madereros y los mapuches, igual que las demás comunidades indígenas, quedaron invisibilizados.

Fue hasta que se convocó a la Constituyente que se les asignaron 17 escaños y pudieron participar por primera vez en la historia con voz propia en un evento político a nivel nacional.

Que Elisa Loncón fuese designada presidenta de la convención que debe redactar la nueva Carta Magna, que sepultará a la escrita durante la dictadura de Pinochet, es un reconocimiento más a los pueblos que forman las raíces de la cultura chilena.

Se trata de una personalidad con una sólida formación, que incluye estudios de pedagogía en inglés, una maestría de lingüística en la Universidad Autónoma Metropolitana de Iztapalapa, México, un doctorado en Humanidades en Leiden, Holanda y otro en literatura de la Universidad Católica de Chile.  

Es también una destacada activista por los derechos de su pueblo, formó parte del grupo que elaboró la bandera mapuche que encabeza tanto protestas como festividades, fue miembro de una compañía de teatro que durante la dictadura presentaba obras contra el régimen militar.

Durante un improvisado discurso tras su elección, con 96 de 155 votos posibles, habló de la fundación de un nuevo Chile, plural, multilingüe, junto con las mujeres y los territorios; donde sea posible establecer una profunda relación entre todos los que viven en ese país.

Al clausurar la primera reunión de la Constituyente, pidió un minuto de silencio en memoria de los muertos durante 500 años, las mujeres víctimas de feminicidio, de los caídos durante la dictadura, de los que fueron reprimidos en la lucha por una nación diferente, justa y solidaria.     FIN    



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