Foto: Granma
Por María Josefina Arce
Hasta diciembre venidero Cuba ocupará la presidencia pro témpore del Comité de Representantes de la ALADI, Asociación Latinoamericana de Integración, una alta responsabilidad que ha calificado como un honor y un compromiso con el trabajo del organismo a favor de desarrollar los vínculos solidarios y de cooperación con las naciones del área.
Desde su incorporación en 1999, la Mayor de las Antillas ha tenido una destacada y activa participación en el bloque, que integrado por 13 países representa a más de 510 millones de ciudadanos.
El pasado año por ejemplo, tuvo lugar en La Habana en el mes de octubre la Macro Rueda de Negocios Expo ALADI, un evento que reunió a cerca de 500 empresarios de la región.
Más de 2 mil 500 citas de negocios se concretaron durante el evento, un paso más en el objetivo del organismo de promover la complementariedad económica regional.
Esa fue la primera ocasión en que la ronda de negocios sesionó en un estado del Caribe, y fue además el primero presencial, después de tres ediciones virtuales por la pandemia de la COVID 19.
Fluida y respetuosa es la relación de Cuba con el organismo, que ha condenado el inhumano bloqueo estadounidense contra el pueblo cubano y cuyo secretario general, el uruguayo Sergio Abreu, visitó el archipiélago en abril del año pasado.
Ya la nación caribeña ha ostentado en otros momentos la presidencia pro témpore del Comité de Representantes de la ALADI y su nueva designación es un reconocimiento al trabajo desarrollado.
Las autoridades cubanas afirmaron que al asumir nuevamente esta tarea trabajarán para respaldar, coordinar y ejecutar las acciones necesarias para la labor de la Asociación Latinoamericana de Integración e incrementar la unidad entre nuestros países.
Desde su incorporación, han destacado los miembros de la ALADI, el país caribeño ha mantenido una actitud preocupada, responsable y un espíritu constructivo, que ha aportado mucho al bloque.
Cuba ha dado muestras de su seriedad y compromiso al hacerse cargo de diferentes responsabilidades en diversos organismos tanto regionales, como internacionales. Su liderazgo y capacidad para llegar a consensos, su defensa de la paz y el multilateralismo han sido altamente reconocidos.