Por: Roberto morejón
Pocos días después de que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, llamara a la comunidad internacional a solidarizarse con su país, el canciller cubano, Bruno Rodríguez, realizó una visita a Caracas.
El jefe de la diplomacia cubana cumplió una agenda de trabajo durante la cual subrayó el apoyo de su gobierno y el pueblo a los venezolanos, en cualquier circunstancia.
El Ministro fue enfático al transmitir que su misión consistía precisamente en confirmar la solidaridad del presidente Raúl Castro y del líder histórico Fidel Castro hacia la nación sudamericana.
El aliento de los cubanos llegó en una coyuntura muy difícil para los venezolanos.
Ese país es blanco de una frenética ofensiva política y mediática de la derecha internacional, con asidero oportunista en la oposición local.
Envalentonada por la victoria transitoria en las elecciones legislativas de diciembre último, la cúpula de la llamada Mesa de Unidad Democrática busca en la OEA y en Miami respaldo a una acción de carácter político y militar contra Venezuela.
El propio Nicolás Maduro denunció en conferencia de prensa que el expresidente colombiano Álvaro Uribe, de visita en Estados Unidos, pidió una intervención militar en Venezuela.
Los manejos en tal sentido se asocian a la guerra económica promovida por los opositores políticos y empresarios, algunos de los cuales han comenzado a detener producciones, con la intención de ahondar la escasez de alimentos y fármacos.
En ese contexto adverso, los venezolanos que apuestan por la paz, la soberanía y el derecho a construir el modelo social que entienden propicio, resulta estimulante la reafirmación del apoyo a la Revolución Bolivariana, como hizo el canciller cubano.
Precisamente, Rodríguez intercambió impresiones con médicos cubanos que atienden comunidades de escasos recursos de Caracas, como parte del plan de salud Barrio Adentro, a cargo de especialistas enviados desde la mayor de las Antillas.
Los profesionales cubanos de la salud, deporte y educación permanecen en sus puestos, porque ahora más que nunca el pueblo venezolano requiere de esos servicios gratuitos.
Días antes de la visita del Ministro cubano de Relaciones Exteriores, hizo una breve escala en Caracas el presidente boliviano, Evo Morales, quien procedente de La Habana creyó oportuno mostrar su respaldo a la hermana Venezuela.
América Latina y el Caribe, así como el resto del mundo, pueden igualmente llamar a favor de la paz en Venezuela y al respeto de su soberanía en circunstancias en que ese país, como dijo Maduro, vive el más rígido cerco mediático y político de los últimos diez años.