La esperanza del mundo

Editado por Maite González Martínez
2017-06-02 09:46:09

Pinterest
Telegram
Linkedin
WhatsApp

Por Susana del Calvo

El panorama internacional de la infancia nos da escalofríos y nos lleva a pensar si esos que se llenan la boca para proclamarse los guardianes de los Derechos Humanos se olvidaron de que alguna vez fueron niños y de que ellos son el futuro de la humanidad.

No son meras palabras y consignas los que ellos necesitan, son hechos concretos a su favor para que esos 600 millones de niños que viven en la pobreza puedan llevarse un pedazo de pan a la boca.

Las estadísticas internacionales reflejan que cada día mueren 27 mil menores de cinco años por causas previsibles y los grandes que pueden decidir contemplan insensibles el panorama como si con ellos no fuera.

El Día Internacional de la Infancia que en la mayoría de los países se celebra el primero de junio, fue establecido para recordar a la ciudadanía que los niños son el colectivo más vulnerable y por tanto que más sufre las crisis y los problemas del mundo.

Entre sus objetivos está eliminar la discriminación, las leyes en favor de los niños, su derecho a la vida, la supervivencia y el desarrollo, así como también la participación de los menos de edad en la toma de decisiones que les afecten.

En Cuba el panorama es diferente, los pequeños son los privilegiados de la sociedad, desde que son concebidos la atención médica es altamente especializada, de ahí que se haya podido lograr que la mortalidad infantil esté alrededor de cuatro por cada mil nacidos vivos y que la de los menores de 5 años de edad sea una de las más bajas del orbe.

Según se destaca en la prensa internacional muy pocos son los países que superan el 30 por ciento de atención en los primeros años de vida, en Cuba con una población infantil entre cero y seis años alrededor de los 900 mil, esa cobertura asciende al 99,5 por ciento.

Con el apoyo de más de 80 mil educadores, 25 mil promotores y la ayuda de varias instituciones sociales y gubernamentales de desarrolla el programa Educa a tu Hijo que es una experiencia cubana en la atención educativa en edades tempranas. Esto se efectúa no sólo en las guarderías estatales, también en la privadas y en el hogar con magníficos resultados.

Todo esto está amparado por un marco legal que además de la Ley de la Maternidad con extraordinarias ventajas para la madre, tiene los Códigos de la Familia, del Trabajo, y el de la Niñez y la Juventud.

No hay nada más importante que la sonrisa de un niño, y ellos sin duda alguna son la esperanza del mundo.



Comentários


Deixe um comentário
Todos os campos são requeridos
Não será publicado
captcha challenge
up