La Habana, 25 abr (PL) El centro de Investigaciones del Deporte Cubano (CIDC) sigue muy activo en tiempos de COVID-19, con la mira puesta en los Juegos Olímpicos de Tokio, aplazados para 2021 por la situación mundial.

Los atletas de la Isla, varios clasificados para la cita bajo los cinco aros y otros pendientes de boletos, continúan la preparación en casa bajo las orientaciones de sus entrenadores.

En busca de información oficial y autorizada sobre el papel del CIDC, dialogamos con el Dr.C. René Romero Esquivel, su director, quien explicó la importante labor de apoyo que realizan sus especialistas.

Romero, director técnico del Comité Olímpico Cubano y miembro de las comisiones técnicas de Panam Sport y la Organización Deportiva Centroamericana y del Caribe (Odecabe), señaló las variantes que se buscan.

Explicó que las agrupaciones deportivas llevaron sus intereses a cada uno de los laboratorios para el perfeccionamiento de lo trabajado hasta la fecha.

Detalló además que existen cinco áreas de conocimientos muy importantes en el Centro. Y se refirió ante todo al observatorio técnico internacional y al gabinete metodológico, que transcriben todo lo que sucede en el deporte mundial, tanto en la práctica como en las investigaciones y el desarrollo de innovaciones en los sistemas de entrenamiento.

Las restantes áreas son también muy importantes, a decir las de biomecánica, cineantropometría, conducta y cardiorrespiratorio.

Añadió que en estos momentos se trabaja en análisis profundos de las debilidades y fortalezas estratégicas de cada deporte en el país.

Destacó que todo eso se constituye en reservas y confidencias de nuestro deporte, surgidas de la relación entre atleta, entrenador y la triada médica que acompaña al equipo interdisciplinario en la preparación.

«Eso nunca se escribe, es información que se guarda en nuestro certificado de calidad. Todo esto se está llevando muy bien», recalcó Romero.

«También trabajamos en el análisis de información, sobre todo de los resultados descritos, y se hacen comparaciones con los anteriores obtenidos a partir del nacimiento de nuestro centro, en septiembre de 2016», reconoció.

El científico explicó que la posposición de los Juegos Olímpicos de Tokio ha dado tiempo a la ciencia para evaluar lo que debe hacerse en cada momento.

«Siempre trabajamos marcándole el paso a la preparación deportiva, pero ahora tenemos más tiempo para estudiar, analizar y evaluar lo que hemos hecho», comentó.

Adelantó además que trabajan para sacar a la luz una revista digital debidamente certificada, que sirva al mundo deportivo internacional.

El CIDC nació después de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016. Fue inaugurado el 21 de septiembre de ese mismo año por el hoy Presidente de la República de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.

Junto a Díaz-Canel asistió el ya fallecido José Ramón Fernández, Héroe de la República de Cuba y para entonces presidente del Comité Olímpico Cubano.

Desde entonces se han hecho importantes contribuciones a la preparación de las delegaciones cubanas asistentes a los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Barranquilla 2018 y a los Panamericanos de Lima 2019.

Según Romero, para esta última cita se presentaron 486 aportes científicos, lo que impactó en el 73% de las medallas obtenidas.