Brasilia, 8 feb (RHC-PL) El diputado federal del Partido de los Trabajadores (PT) Wadih Damous descalificó hoy al nuevo presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil, Luiz Fux, a quien acusó de querer legislar e inventar teorías.
Fux 'desmoraliza la justicia electoral', escribió el parlamentario en su cuenta de Twitter y subrayó que quien es considerado el padre de la ilegal ayuda para vivienda concedida a los jueces, cuya reciente revelación ha causado indignación popular, ahora resolvió legislar e inventó la teoría del 'irregistrable'.
Al tomar posesión del cargo, el martes último, Fux se dijo a favor de que los jueces del TSE puedende impedir el registro de aspirantes encuadrados en la llamada Ley de Ficha Limpia (condenados en segunda instancia), aún sin que la candidatura fuera impugnada por partidos políticos, alianzas electorales o el Ministerio Público.
Abogado de profesión, Damous señaló además que los 'moralistas togados se hundieron en su propia inmoralidad' y desenmascarados con los ilícitos auxilios recibidos son ahora blanco del escarnio y la indignación popular.
Previamente, la senadora y presidenta nacional del PT, Gleisi Hoffmann, criticó también la intención de Fux de crear un derecho electoral específico para castigar al ex dignatario Luiz Inácio Lula da Silva y excluirlo de la contienda electoral de octubre próximo, para la cual todas las encuestas lo sitúan como amplio favorito.
Fux -dijo- todavía no entendió que quien legisla en Brasil es el Poder Legislativo y que el juez no tiene esa función. 'No está dentro de sus prerrogativas alterar el sentido de la ley, o crear interpretaciones que son mucho más voluntad que lo dispuesto en la legislación brasileña', enfatizó.
En entrevista concedida en noviembre último al diario Folha de Sao Paulo, el ahora presidente del TSE declaró que no veía mucho sentido a que Lula inscribiera su candidatura, pues ya estaba denunciado ante la justicia.
La apreciación fue rebatida entonces por el abogado Cristiano Zanin, que forma parte de la defensa de Lula y quien sostuvo que Fux estaba haciendo un 'pre-juzgamiento' y desafiando el ordenamiento jurídico internacional.