Buenos Aires, 8 ene (RHC) Los trabajadores de la Biblioteca Nacional de Argentina Mariano Moreno protestaron en las inmediaciones de la instalación para rechazar los nuevos despidos notificados a finales de 2018.

En declaraciones al diario Página 12, los empleados de esa institución calificaron de crítica la gestión de los últimos años, pues a las cesantías masivas se suma el vaciamiento constante de la biblioteca luego de la llegada del presidente Mauricio Macri al gobierno.

El objetivo de la protesta es conseguir una reunión con los directivos del centro y lograr que al menos tres de los últimos despidos sean revisados, pues se trata de madres jefas de hogares que no cuentan con otro ingreso económico.

Las últimas 20 expulsiones, notificadas antes de las fiestas de fin de año, se suman a los 240 trabajadores que desde marzo de 2016 tuvieron que abandonar sus puestos.

Como resultado de estos ajustes, desaparecieron distintas áreas de la biblioteca y se cerró el museo del Libro y de la Lengua.

El Instituto Estadístico de los Trabajadores (IET) informó que la inflación del 2018 alcanzó el 47,8 por ciento, la mayor cifra registrada en Argentina luego de 1991 cuando llegó a los 84 puntos porcentuales.

De acuerdo con el reporte, el pasado año la mayor parte de los elementos de la canasta de precios subieron por encima del 40 por ciento, con excepción de la indumentaria, el calzado y la educación.

El renglón de mayor incremento fue la vivienda, con el 54 por ciento, seguido por el equipamiento del hogar con 52,5, transporte y comunicaciones 52,4 y los alimentos 46,9.

Medios locales afirman que el gobierno de Cambiemos, encabezado por Mauricio Macri, llegó a la administración pública nacional con un nivel de inflación del 23,8 por ciento anual en octubre de 2015.

No obstante, la devaluación monetaria y los aumentos de tarifas condujeron a un alza de los precios superior al 44 por ciento y esto trajo consigo una caída del salario real del 17,3 por ciento de forma acumulada desde noviembre de 2015.

Según la IET, esta reducción de los sueldos es la disminución más profunda desde la crisis de 2001 en este país.

El documento también señala que la inflación afecta más a los sectores de la población con menores ingresos.