Moscú, 6 jul (RHC) Rusia denunció los intentos de algunos sectores en Estados Unidos de impedir pasos para mejorar las relaciones bilaterales, contrario a los tímidamente positivos resultados de un reciente encuentro de los presidentes de ambos países.

La Cancillería rusa señaló que el documento Concepción de contrarresto de la influencia nociva del Kremlin, presentado por el director de la USAID, Agencia para el Desarrollo Internacional, Mark Green, solo busca frenar la normalización de los nexos entre los dos estados.

El texto del ministerio de Asuntos Exteriores, destaca que un documento oficial como el mencionado, publicado por un alto funcionario de la actual administración presidencial, los llena de pesimismo.

Afirma la declaración que ese documento esta en total discordancia con el tono constructivo observado en el reciente encuentro en la ciudad japonesa de Osaka entre los mandatarios de Rusia, Vladimir Putin, y de Estados Unidos, Donald Trump.

Por su parte  Carlos Faría embajadorde Venezuela en Rusia afirmó que Estados Unidos intenta resucitar la Doctrina Monroe, una estrategia imperial del siglo XIX, aplicada ahora en el caso de Venezuela.

Estados Unidos, además de buscar la aplicación de la Doctrina Monroe para su dominio y control de América Latina, también sufre del síndrome hegemónico, como si el mundo girara solo en torno al país norteño, declaró el diplomático venezolano.

Para impedir que Estados Unidos y sus aliados tengan éxito en sus pretensiones de derrocar al gobierno constitucional de Nicolás Maduro, la comunidad internacional debe activarse en defensa del principio de autodeterminación de los pueblos, sugirió.

Ello también debe incluir una objetiva y equilibrada respuesta de instituciones internacionales y la solidaridad de los pueblos del mundo contra las mencionadas pretensiones, comentó Faría en el acto por los 208 años de la independencia venezolana.

Los métodos empleados por Estados Unidos han sido de las más duros aplicados sobre país alguno en tan corto periodo de tiempo, declaró el embajador venezolano ante diplomáticos, agregados militares, funcionarios del gobierno ruso y empresarios.

Ello incluyó boicots económicos y financieros, intentos de golpe de estado, de magnicidio y de asesinatos de nuestros líderes, retención y confiscación o más bien robo de empresas, amenazas de intervención y sanciones unilaterales, destacó.

Además se financiaron grupos desestabilizadores, se presionó y sobornó a una parte muy reducida de militares para propiciar un golpe de estado, y se intentó provocar una guerra fratricida, con las guarimbas (desórdenes callejeros) de 2014 y 2017.

A causa del bloqueo económico impuesto por Estados Unidos a Venezuela, del 2015 al 2018 se registraron pérdidas económicas en el orden de los 130 mil millones de dólares, denunció Faría.

De su lado, el viceministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguei Riabkov reiteró que Rusia reitera su posición de mantenerse unida, junto a los amigos de Venezuela, y contrarrestar junto a ella los intentos de desestabilizarla.

La asociación estratégica de Rusia y Venezuela responde completamente a las realidades modernas y confirma las posibilidades de cooperación mutuamente ventajosas, estimó el vicejefe de la diplomacia rusa.

Precisamente, de esa colaboración deberían tomar el ejemplo varios países, cuyos dirigentes intentan ahora reanimar estrategias imperialistas del siglo XIX, denunció Riabkov.