La Paz, 11 may (RHC) El gobierno de Bolivia creó el Consejo de Defensa de los Manantiales del Silala y todos los recursos hídricos cercanos a la frontera con Chile, ante la disputa con el vecino país.

En conferencia de prensa desde el Palacio de Gobierno, anunció el ministro boliviano de Relaciones Exteriores, David Choquehuanca, que el Consejo será presidido por el presidente Evo Morales y se encargará de realizar las gestiones necesarias a fin de recuperar ese manantial.

Previamente el primer mandatario boliviano denunció que el gobierno chileno instaló una base militar a solo 15 kilómetros del manantial Silala, un hecho que consideró ilegal, sobre todo en tiempos de integración de los pueblos.

Además, las autoridades de Bolivia argumenta que las aguas del Silala nacen en su territorio y que fueron artificialmente canalizadas por Chile hace una centuria.

Por su parte la presidenta de la Cámara de Diputados de Bolivia, Gabriela Montaño, afirmó que la instalación de una base militar chilena a 15 kilómetros de la frontera común es una mala señal ante los ojos del mundo.

No está bien que un país que se precie de moderno, de democrático, amenace a sus vecinos con bases militares, simplemente porque ese vecino tomó la decisión soberana y pacífica de acudir a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, argumentó la legisladora en diálogo con periodistas.

Montaño explicó que la instalación del puesto de avanzada castrense fue confirmada en una publicación oficial del Ministerio de Defensa de Chile, en su página oficial de Internet.

La Presidenta de la Cámara baja consideró que, con esa actitud, Santiago pretende amedrentar a Bolivia, para que desista de la demanda por el uso "abusivo" de las aguas de los manantiales del Silala.

El sábado, el presidente Evo Morales alertó a la opinión pública mundial sobre el establecimiento de una base militar chilena muy próxima a la frontera binacional.

Consideró el hecho como una respuesta soberbia y amenazante de Santiago ante la demanda sobre las aguas del manantial de Silala.

Mediante un comunicado de prensa, la Cancillería chilena indicó que no existe tal instalación militar.

Puntualizó que "lo que ha habido es una intensificación del patrullaje militar en territorio chileno para impedir los ataques contra civiles, robos, contrabando y narcotráfico".

No obstante, el procurador general del Estado Plurinacional, Héctor Arce, aseveró que la instalación del puesto castrense "fue comprobada con la tecnología necesaria", y coincide con declaraciones de autoridades de Chile, quienes afirmaron que las Fuerzas Armadas de ese país están preparadas para defender los tratados internacionales.

Sus aguas, nacidas en el sudoeste andino del territorio boliviano, abastecen desde hace más de un siglo a varias ciudades del norte de Chile y al emporio cuprífero de Chuquicamata, sin que medie retribución.

El tema fue incorporado en la agenda de 13 puntos que La Paz y Santiago negociaron entre 2006 y 2010, que incluye también la demanda boliviana para lograr una salida soberana al océano Pacífico.

Santiago alega que el Silala es un curso internacional de agua y en 2009 propuso reconocer un pago de entre tres y cinco millones de dólares anuales, por el consumo del 50 por ciento del recurso hídrico; sin embargo, ese trato nunca se concretó, aseguran las autoridades.

El 23 de marzo, el jefe de Estado boliviano instruyó a la Dirección Estratégica de Reivindicación Marítima estudiar alternativas para defender la soberanía de los surtidores y encargó a un equipo de alto nivel trabajar en los tres pilares que conformarán la futura demanda: jurídico, histórico y técnico.