Washington, 16 jun (RHC) El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunciará este viernes cambios en la política hacia Cuba que contradicen los deseos e intereses de numerosos sectores y de la mayoría de los ciudadanos norteamericanos.
El gobernante arribará al mediodía de este viernes a la ciudad de Miami, en el sureño estado de Florida, dispuesto a revertir diferentes aspectos de las medidas de acercamiento a la isla impulsadas por su predecesor, Barack Obama (2009-2017), refiere Prensa Latina.
A pesar de que en los últimos días legisladores republicanos y demócratas, líderes empresariales, compañías de viajes y cubanoamericanos, entre otros círculos, le pidieron mantener el rumbo del acercamiento, detalles citados por medios locales indican que sus voces no serán escuchadas.
De acuerdo con Politico.com y The New York Times, que dijeron haber visto el borrador de una orden ejecutiva del primer mandatario, su contenido estará enfocado en restringir los viajes y las transacciones comerciales con empresas estatales cubanas.
Según adelantaron, el anuncio, previsto para las 13:00 hora local en un teatro miamense, busca reafirmar la vigencia del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Washington al país caribeño hace 55 años.
Los viajeros estadounidenses podrán realizar pagos al sector privado, pero se verán imposibilitados de recurrir a muchos hospedajes o servicios gestionados por empresas estatales.
Además, se espera un endurecimiento de los requisitos que deberán cumplir los interesados en visitar la nación antillana, quienes tendrán que probar su pertenencia a una de las categorías de viaje autorizadas e ir al territorio vecino como parte de algún grupo, y no de modo individual.
Politico.com manifestó que la administración de Trump pedirá un horario completo de las actividades que desarrollarán en la isla los norteamericanos, quienes tendrán que enfocarse en 'una interacción significativa con los cubanos'.
En el caso de compañías con sede en Estados Unidos, como la Starwood Hotels, propiedad de Marriott, la política de Trump podría significar la cancelación de la licencia para operar en el país caribeño.
Los adelantos sobre la orden ejecutiva ya provocan críticas desde los sectores que quieren continuar el acercamiento a Cuba, un proceso que es apoyado por el 65 por ciento de los estadounidenses, según un sondeo difundido esta semana.
A decir de James Williams, presidente de la Coalición Engage Cuba, la política que dará a conocer Trump fue claramente escrita por personas que nunca han estado en la nación antillana, 'al menos no en este siglo'.
Es una pena que haya escuchado a dos miembros de línea dura del Congreso en lugar de a la mayoría de su base republicana, del pueblo estadounidense y a casi todos los cubanos, lamentó en alusión a la forma en que presionaron a Trump el senador Marco Rubio y el congresista Mario Díaz-Balart.