Moscú, 30 ago (RHC) Científicos de las universidades rusas que integran el Proyecto 5-100 alertaron que la contaminación de la atmósfera ha llegado a niveles críticos, por lo que hoy 90 por ciento de la población respira aire viciado.
Los investigadores integrados a ese proyecto, que pretende reforzar la capacidad científica e investigadora de los centros de educación superior, aseveran que cada año mueren siete millones de personas por esa causa relacionada con enfermedades infecciosas, cardíacas, oncológicas y complicaciones asociadas con el embarazo.
También afirman que a pesar de las oportunidades que brindan los avances tecnológicos en muchas regiones del planeta se sufre escasez de aire puro y agua limpia.
Por las alarmantes cifras de víctimas de esos fenómenos, el secretario general de la ONU, António Guterres, subrayó que millones de especies animales y vegetales están en peligro de extinción, y los mares son vulnerables a ese impacto negativo.
Por su parte, el relator especial de las Naciones Unidas, David Boyd, instó a los países a combatir la contaminación del aire, cumpliendo sus compromisos en materia de derechos humanos, porque el aire limpio es un elemento clave del derecho a un medio ambiente sano.
En opinión de los especialistas para proteger la atmósfera es imprescindible contar con un sistema fiable y eficaz de vigilancia de su estado en tiempo real, lo cual demanda herramientas para evaluar la calidad del aire, identificar las fuentes de contaminación y determinar el grado de peligro de estas.
Sobre el tema las universidades rusas trabajan en la creación de un inventario de partículas de polvo hasta la construcción de minilaboratorios voladores.
En tal sentido, un estudio conjunto de la Universidad Federal de y ecologistas permite crear una base de datos de partículas de polvo tóxicas, para lo cual utilizan un filtro especial que permite conocer la composición elemental de las partículas de polvo, así como su forma, tamaño, carácter de la superficie y la fuente de origen.
Estos estudios parten de que el polvo urbano (sobre todo, el fino de menos de 2,5 micrómetros) es el medio de transporte principal y universal de la mayoría de las sustancias contaminantes hacia los pulmones humanos.
'Sin entender la composición del polvo, es difícil evaluar correctamente su posible impacto en el medio ambiente y la salud del hombre, así como identificar con precisión la fuente de contaminación', sostiene Ruslán Sharafutdínov, director del Instituto de Ecología y Geografía de ese centro de estudios superiores. (Fuente: Prensa Latina).