La Habana, 9 jun (RHC) La tormenta tropical Amanda ingresó el 31 de mayo a Guatemala procedente del Océano Pacífico y sobre ese territorio se disipó ese mismo día.
A partir de sus remanentes, el propio primero de junio se formó una depresión tropical en la zona este de la bahía de Campeche y al siguiente día estábamos en presencia de la tormenta Cristóbal.
Al surgir Cristóbal el dos de junio se quebró el récord de formación más temprana de la tercera tormenta tropical de una temporada ciclónica que se había obtenido con el nacimiento de Colin en el golfo de México —al norte de la península de Yucatán— el cinco de junio de 2016.
Durante los días 5 y 6 del presente mes, fuertes vientos del sudeste al sur ocurrieron en el occidente del archipiélago cubano en relación con la amplia circulación de Cristóbal y el aumento del gradiente de presión.
El Centro de Pronósticos del Instituto de Meteorología informó que, el viernes, en la estación de San Juan y Martínez se registró una ráfaga máxima de 91 kilómetros por hora.
Por la influencia de bandas externas del ciclón acaecieron chubascos, lluvias y tormentas eléctricas en las provincias de Pinar del Río, Artemisa, La Habana y Mayabeque, así como en la Isla de la Juventud.
El doctor Richard Pasch, especialista del Centro Nacional de Huracanes de los Estados Unidos, escribió en la tarde del sábado “Cristóbal sigue careciendo de la apariencia y estructura de un típico ciclón tropical. De hecho, el largo radio de vientos máximos y las bandas convectivas bien alejadas del centro son más característicos de un ciclón subtropical”.
Para el 3 de junio, el centro de Cristóbal tocó tierra cerca de Atasta, justo al oeste de Ciudad del Carmen, en el estado mexicano de Campeche, con vientos máximos sostenidos de 95 kilómetros por hora y presión mínima de 994 hPa, y el día 7 en Luisiana, EUA (85 km/h; 992 hPa). (Fuente: Cubadebate)