Esto a pesar de la mejora de las condiciones meteorológicas en las últimas horas, que ha ayudado a reducir su rápida expansión, de acuerdo con el portavoz de Cal Fire, Jason Hunter.

Este fuego, bautizado por las autoridades como Caldor, ha sido impulsado por el viento y las condiciones secas de la zona este de Sacramento (California, EE.UU.) hasta quemar más de 43.100 hectáreas.

Hasta ahora, los bomberos no han sido capaces de superar el 5 % de contención de un fuego que empezó a arder el pasado 14 de agosto por causas todavía desconocidas.

Según el último reporte, las llamas se están acercando a Kyburz, una pequeña comunidad de unos 200 habitantes.

De acuerdo con datos del Cal Fire, al menos 207 camiones de bomberos y 20 helicópteros han estado ayudando a combatir este incendio, lo que requiere un personal de más de 1.600 personas.

Ese fuego se desarrolla en California a la vez que el incendio Dixie, el segundo más grande en la historia de ese estado, que lleva ardiendo más de un mes pese al constante esfuerzo de los casi 6.200 bomberos desplegados en la zona.

Los últimos datos apuntan a que Dixie, que está contenido en un 40 %, ha quemado 293.729 hectáreas.

En este caso, el incendio ha destruido 1.259 edificios, incluyendo 678 residencias.

A principios de este mes, Dixie arrasó en gran medida la población de Greenville, de unos 1.100 residentes.