FAO
La Habana, 9 mayo (RHC) La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) avaló la introducción en Cuba de prácticas forestales, agroforestales y silvopastoriles sostenibles hoy frente a los desafíos climáticos.
Con financiamiento del Fondo Verde para el Clima y asistencia técnica de la FAO, el Ministerio de Agricultura de la nación caribeña responde por la implementación del proyecto, denominado Resiliencia Climática en Ecosistemas Agrícolas de Cuba, recordó el organismo internacional.
A la luz de la iniciativa, sesionó otro taller entre agricultores, ganaderos y técnicos para compartir experiencias sobre la implantación de cultivos varios, plantaciones forestales, frutales, forrajeras y de árboles de sombra, en hectáreas de tierra que anteriormente estaban infectadas de marabú.
Según explicó la FAO, el encuentro centró su interés en la exposición de resultados sobre las transformaciones en curso para elevar la producción de alimentos, carnes y leche en siete municipios del país altamente vulnerables a los efectos del cambio climático.
Durante las jornadas, los participantes destacaron la importancia de la diversificación de los sistemas de producción agrícola y ganadera, así como del uso eficiente de los recursos naturales para garantizar la sostenibilidad de la producción y la conservación del medio ambiente.
Asimismo, resaltaron la importancia de fortalecer la capacitación y el intercambio de conocimientos entre los actores del sector.
Expertos y especialistas recibieron capacitación en el uso de una infraestructura de datos espaciales, la cual permitirá el monitoreo de información para las actividades de seguimiento del trabajo de restauración productiva que lleva a cabo el proyecto, reveló la FAO.
A juicio de la entidad de Naciones Unidas, el taller constituyó una oportunidad para fomentar el diálogo y compartir buenas prácticas en aras del desarrollo rural sostenible en esta nación insular.
Aprobado en 2020, el proyecto trabaja en la restauración de ecosistemas degradados y áreas mayormente cubiertas por marabú en unas 36 mil hectáreas, en las cuales se implementan sistemas forestales, agroforestales y silvopastoriles, precisó la fuente. (Fuente:PL)