La Habana, 12 feb (PL) El Festival de Música Antigua Esteban Salas, celebrado en Cuba con participación de artistas de varios países, se desarrolló hasta este domingo en La Habana con la participación de interpretes de varios países.
La noche de clausura cierra con un concierto de Ensemble Zefiro, de Italia, sobre composiciones instrumentales del barroco tardío.
La ceremonia artística dirigida por Alfredo Bernardini pretende reverenciar la época de oro del oboe y el fagot, instrumentos de la familia viento-madera.
Ensemble Zefiro es una de las agrupaciones emblemáticas de la música antigua, pero desde que el 4 de febrero inició la cita convocada por Cuba acudieron también otros relevantes como el conjunto estadounidense Asteria, y el formado por instrumentistas argentinos y colombianos Antiqua Camera.
De Austria y Alemania llegaron el Salzburger Barock-Trio para presentar obras del barroco alemán de autores como Georg Friedrich HÃñndel, Johann Sebastian Bach y Georg Philipp Telemann.
El clavecista italiano Daniel Ferrer, ganador del premio Ruspoli de música barroca en 2016, ofreció un concierto memorable el pasado 9 de febrero en la antigua iglesia de San Francisco de Paula, con partituras de Alessandro y Domenico Scarlatti, Bernardo Storace y Domenico Zipoli.
Además de esa sala, el Oratorio San Felipe Neri, la Parroquia del Santo Ángel Custodio y el Teatro Martí fueron las sedes del festival que mantuvo como premisas la formación académica y el incentivo a músicos cubanos para seguir investigando en el repertorio y la interpretación de la música antigua.
El conjunto cubano Ars Longa, anfitrión del evento, estrenó en este país su más reciente montaje ÂíCarnaval!, un espectáculo ilustrativo de las festividades en el contexto virreinal americano y que por tanto incluye expresiones danzarias y musicales.
La posibilidad de mostrar la danza como manifestación del arte no solo gestual sino musical fue uno de los mayores atractivos de la cita, cuyo programa comprendió 12 conciertos y ocho talleres impartidos por personalidades de México, Colombia, Alemania, Austria y Gran Bretaña.
Un día antes de la clausura, la New York Baroque Dance Company, de Estados Unidos, actuó en el habanero Teatro Martí, para mostrar la repercusión escénica de las danzas barrocas europeas de los siglos XVII y XVIII.
