Washington, 30 may (RHC) El amor de Kitri y Basilio inundó esta capital con el alabado estilo del Ballet Nacional de Cuba (BNC), que recibió fuertes vítores por la obra Don Quijote y hoy volverá a regalarla al público estadounidense. Gran ovación recibió también su directora Alicia Alonso, quien subió al escenario para agradecer al público su deferencia hacia ella.
En la Casa de la Ópera del Centro John F. Kennedy para las Artes Escénicas, cientos de corazones latieron al ritmo de los movimientos de virtuosos bailarines que se entregaron por entero a la pieza inspirada en la novela Don Quijote de la Mancha, del español Miguel de Cervantes, reseña Prensa Latina.
La obra con coreografía de la prima ballerina assoluta Alicia Alonso, Martha García y María Elena Llorente, sobre la original de Marius Petipa, y la versión de Alexander Gorski, consiguió conquistar a una audiencia en la que había muchos conocedores del género.
Deslumbrante estuvo la primera bailarina Viengsay Valdés en el papel de Kitri, que le ha dado grandes éxitos internacionales y con el cual volvió a enamorar al público norteamericano, ante el cual lo representó antes.
Dani Hernández, primer bailarín de la compañía, se mostró impecable en su interpretación de Basilio y, junto a Valdés, arrancó ovaciones en varios momentos, sobre todo en el Grand pas de deux del tercer y último acto.
Muchas muestras de admiración también provocaron Claudia García y Chanell Cabrera como Reina de las Dríadas y el Amor, respectivamente, así como Ariel Martínez como Espada, el torero, y Ginett Moncho como su amante Mercedes.
Pero más allá de las electrizantes ejecuciones, quizás el momento más emocionante de la velada fue cuando se anunció la presencia de Alicia Alonso en la Casa de la Ópera.
En el momento en que se conoció que allí se encontraba la fundadora y directora de la compañía, los presentes se levantaron de sus asientos y se unieron en un largo aplauso.
Las ovaciones fueron aún más prolongadas cuando, al término de la función, la mujer de 97 años subió al escenario junto a los miembros de su conjunto para saludar al público, que destilaba gozo por saberse en presencia de una leyenda del arte universal.
Ya antes del inicio de la obra los asistentes disfrutaron de un video elaborado por el Museo Nacional de la Danza de Cuba y el Centro Kennedy, en el cual se mostraron imágenes de la niñez de Alonso y su etapa como bailarina.
Ese breve material incluyó titulares aparecidos en la prensa norteamericana cuando el BNC realizó su primera gira por Estados Unidos, lo cual sucedió un día como hoy hace 40 años, precisamente en la institución cultural donde se presenta ahora.
Hasta ese espacio cultural llegó Iris Lipkowitz, una capitalina amante de la danza que, según expresó a Prensa Latina, tuvo el placer de ver bailar a Alonso con el American Ballet Theater.
El jueves regreso a ver Giselle, aseguró Lipkowitz, quien dijo que no quiere perderse ese otro clásico que el BNC tendrá en cartelera desde ese día y hasta el domingo, cuando concluirá el festival Artes de Cuba inaugurado en el Centro Kennedy el 8 de mayo. Para este miércoles, en tanto, Don Quijote regresará a la escena con Grettel Morejón y Rafael Quenedit como protagonistas.
(Prensa Latina)