Actriz y productora Julianne Moore, víctima de nuevas políticas de Trump en educación y cultura

Editado por Bárbara Gómez
2025-02-20 18:04:27

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Imagen: Yahoo.

Washington, 20 feb (RHC) La actriz y productora estadounidense Julianne Moore es quizás hoy la penúltima víctima de las políticas que en la educación y la cultura implementa Donald Trump desde que inició su segunda temporada en la Casa Blanca.

Moore expresó su tristeza, sorpresa e incredulidad al enterarse que el gobierno de Donald Trump prohibió su primer libro infantil Freckleface Strawberry (2007) en las escuelas dirigidas por el Departamento de Actividad Educativa de Defensa, que dirige centros docentes en bases militares de todo el mundo.

“Y no puedo evitar preguntarme qué tiene de polémico este libro ilustrado que provocó que el Gobierno de Estados Unidos lo prohibiera”, escribió la actriz en su cuenta en la red social Instagram.

Estoy realmente triste y nunca pensé que vería esto en un país donde la libertad de expresión es un derecho constitucional, subrayó la galardonada actriz, ganadora de los cuatro premios más importantes de la industria cinematográfica: el Óscar, los Globos de Oro, el BAFTA y el del Sindicato de Actores.

Dijo que Freckleface Strawberry (Fresa pecosa) es una historia semiautobiográfica sobre una niña de siete años a la que no le gustan sus pecas, pero que finalmente aprende a vivir con ellas cuando se da cuenta de que es diferente “como todos los demás”.

Moore, conocida por su participación en películas como The Lost World: Jurassic Park (1997), Hannibal (2001), Las horas (2002), A Single Man (2009) o La habitación de al lado (2024), confesó que ese fue un “libro que escribí para mis hijos y para otros niños”.

Su objetivo era “recordarles que todos luchamos, pero que estamos unidos por nuestra humanidad y nuestra comunidad”, enfatizó.

Según reveló la actriz, hija de un veterano de la guerra de Vietnam, supo del veto impuesto a su obra a través de Pen America, una organización que protege la libertad de expresión en Estados Unidos.

Lo ocurrido a Moore no es un caso aislado en medio de un control casi absoluto de Trump a golpe de órdenes ejecutivas que van desde inmigración hasta la eliminación de programas de equidad y diversidad desde que asumió el poder el pasado 20 de enero.

Parece que están apuntando o prohibiendo/restringiendo cualquier libro que quizás señale que algunas personas son tratadas de manera diferente y eso lo consideran un error, a juicio de internatutas que leyeron la denuncia.

Están intentando borrar lo que llaman “ideología de equidad discriminatoria”, porque, a tono con la reciente acción ejecutiva, “estas prácticas no solo erosionan el pensamiento crítico, sino que también siembran división, confusión y desconfianza, lo que socava los mismos cimientos de la identidad personal y la unidad familiar”.

El republicano quiere también desmantelar el Departamento de Educación y asumió hace poco una semana la presidencia de la junta de una de las instituciones culturales más prestigiosas de Washington D.C. y del país, el Centro Kennedy para las Artes Escénicas, fundado en 1971.

Con su entrada, algunos artistas vinculados con el centro renunciaron como el músico Ben Folds después de “ocho años maravillosos” como asesor de la Orquesta Sinfónica Nacional. También se marcharon la cantante Renée Fleming y Shonda Rhimes, una reconocida escritora y productora de televisión.

Trump fue elegido por una junta que excluyó a los 18 designados demócratas purgados por el presidente, quien, como asegura la radio pública NPR, se jactó de no haber asistido nunca a una actuación en el Kennedy. (Fuente: Cubadebate).

 



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