La Habana, 17 dic (REUT/RHC) Un futbolista brasileño que sobrevivió al accidente aéreo en el que murieron casi todos los jugadores del Chapecoense el mes pasado en Colombia cambió su asiento en el último momento, después de que un colega le animó a sentarse a su lado, afirmó el sábado.
El defensa brasileño Alan Ruschel estaba sentado cerca de la parte trasera del avión cuando el director del club, Cadu Gaúcho, le pidió cambiarse de sitio en el viaje que les llevaba a Medellín para jugar el partido de ida de la final de la Copa Sudamericana contra el Atlético Nacional.
"Cadu Gaúcho me pidió sentarme más adelante para dejar que los periodistas se sentaran juntos en la parte de atrás", dijo Ruschel a los reporteros en su primera conferencia de prensa desde el accidente del 28 de noviembre.
"No quería, pero entonces vi a (el arquero Jackson) Follman, que insistió en que me sentara a su lado", señaló. "Solo Dios puede explicar por qué sobreviví al accidente. Me agarró y me dio una segunda oportunidad", afirmó Ruschel, de 27 años, uno de los seis únicos sobrevivientes de la tragedia, en la que perecieron 71 personas.
Follman, uno de los mejores amigos de Ruschel en el equipo, sobrevivió también, pero los médicos tuvieron que amputarle parte de una pierna. En la mañana del sábado fue trasladado en una ambulancia aérea desde Sao Paulo a un hospital en la ciudad de la que es originario el club, en el sur de Brasil.
"No recuerdo nada del accidente", dijo Ruschel en el Arena Conda, el estadio de la escuadra de Chapecó. "Cuando me dijeron lo que pasó, parecía un sueño, una pesadilla. Me han ido contando poco a poco lo que pasó y estoy empezando a comprender. Intento no hablar del accidente, evito las noticias, pero por lo poco que he visto, creo que hubo codicia por parte del piloto".
El piloto del avión de la compañía boliviana LaMia fue acusado de despegar sin combustible suficiente para completar el vuelo. Las autoridades bolivianas suspendieron la licencia operativa de la aerolínea y reemplazaron a la administración de su autoridad aeronáutica para asegurar una investigación transparente.
Ruschel prometió volver a Colombia y preparar a sus médicos uno de los célebres asados del sur de Brasil. También aseguró que visitará a todas las familias de sus compañeros fallecidos antes de regresar a la pequeña localidad de Chapecó y seguir con sus sesiones de fisioterapia para volver a ponerse en forma.