Los Tigres de Ciego de Ávila y su manager Roger Machado están a las puertas de su tercera coronación consecutiva en el Campeonato cubano de béisbol, una empresa harto compleja que necesitará de concentración y fe en el triunfo.
Según Machado, el gran artífice de los éxitos en el pasado reciente, los avileños llegan en óptimo estado de forma y sin lesiones a la gran final del campeonato, la cual dirimirán desde mañana contra los Alazanes de Granma.
Preguntado por Prensa Latina, el estratega de los Tigres, monarcas de Cuba en 2012, 2015 y 2016, destacó que el pitcheo de su equipo está muy descansado, algo muy importante y positivo para afrontar la finalísima del torneo ante un equipo tan bateador como el granmense.
Sin embargo, pronosticó que la serie por el título nacional se extenderá 'hasta un sexto o séptimo partido', dada la paridad reinante entre los contendientes, aunque más adelante precisó: 'La motivación de todos los jugadores está al máximo, listos para ganar el campeonato'.
Ciego de Ávila accedió a la serie por el trono tras desbancar en seis partidos en semifinales a Villa Clara, mientras Granma logró su boleto al deshacerse del superfavorito elenco de Matanzas, en siete desafíos.
Durante la temporada regular, Tigres y Alazanes se midieron en 12 ocasiones, con nueve victorias para los campeones vigentes por solo tres de los retadores. Sin embargo, vale la pena destacar que cinco de los triunfos avileños fueron por margen de una carrera.
Roger Machado anunció también que pretende utilizar una rotación de cuatro abridores, liderada por su principal astro, el derecho Vladimir García, y secundada por los escuderos Bladimir Baños, Dachel Duquesne y Erlis Casanova.
Estamos a las puertas de ganar el tercer título nacional consecutivo. Sabemos que es algo muy difícil pero lo vemos como una posibilidad real. Todo depende de nosotros, sentenció el manager de los felinos, principal candidato a dirigir a Cuba en el IV Clásico Mundial, en marzo próximo.
En 55 series nacionales previas, solo Industriales (1963, 1964, 1965, 1966), Villa Clara (1993, 1994, 1995) y Santiago de Cuba (1999, 2000, 2001) lograron ganar tres campeonatos en fila, una odisea de marca mayor. Solo los industrialistas pudieron levantar cuatro veces seguidas el trofeo.
Asimismo, Roger señaló a 'la unidad y el colectivismo como las grandes fortalezas del equipo de Ciego. Nuestra fórmula es trabajar y trabajar. Hemos aprendido a ganar en playoff, eso es vital. Tenemos mucha química desde hace varios años'.
Sobre sus adversarios alabó el gran trabajo que han realizado en los últimos años y la buena selección de refuerzos para las fases decisivas de la Serie, además de recordar que llegaron a la final tras eliminar al Matanzas del récord de 70 victorias (para temporadas de 90 juegos).
Roger Machado es el corazón del equipo avileño. Desde su llegada al poder en 2009, la escuadra avileña dejó atrás añejos sentimientos derrotistas para convertirse en un equipo ganador y deshinibido, capaz de codearse con los mejores, al extremo que ganó tres de los últimos cinco certámenes domésticos.