Londres, 13 ago (PL) Cuba tuvo hoy otra decepción enorme en el Mundial de atletismo con sede en esta capital, al quedarse sin medallas en el lanzamiento del disco para damas, cuando, a priori, esperaba colocar dos competidoras en el mismísimo podio de premiaciones.
Yaimé Pérez, segunda mejor tiradora de la temporada 2017, y Denia Caballero, campeona mundial en Beijing-2015, tuvieron una jornada para el olvido, signada por disparos de mediano alcance y mucha presión en sus ojos.
Antes de comenzar la cita del orbe, estas dos discóbolas, junto con la pertiguista Yarisley Silva, eran las principales candidatas a medallas de Cuba en la justa, sin embargo, la historia se enredó y el fiasco tomó proporciones dramáticas.
Pérez y Caballero debieron conformarse con ubicarse en los lugares cuatro y cinco, con tiros de 64.82 metros y 64.37, respectivamente, por detrás de la superfavorita croata Sandra Perkovic (70.31), titular olímpica y mundial, la australiana Dani Stevens (69.64) y la francesa Mélina Roberto-Michon (66.21).
Las aspiraciones de Cuba de alcanzar alguna otra presea en el disco se esfumaron en cuestión de minutos.
A modo de recordación, la peor actuación de Cuba en el medallero de los Campeonatos Mundiales databa de Roma-1987, cuando alcanzó apenas dos terceros lugares.
Ahora solo atesora un metal de bronce -conquistado in extremis por Silva-, cuando solo falta por competir el relevo 4x400 masculino, cuyas posibilidades de subir al podio son muy escasas, aunque el deporte es una caja de sorpresas.
O sea, la mayor isla de las Antillas, otrora potencia del atletismo en el planeta Tierra, está muy cerca en Londres de su actuación más funesta en citas del orbe.