Ekaterimburgo, Rusia, 27 jun (PL) La faena de México en el Mundial de fútbol es idílica, perfecta e incluso histórica con su triunfo sobre Alemania, pero toda la felicidad acumulada en Rusia se pudiera convertir en un infierno si pierde hoy ante Suecia en el grupo F.
Los aztecas nunca habían vencido a los germanos en citas del orbe y lo consiguieron sensacionalmente en su debut; y desde 2002 no conseguían dos triunfos en sus dos primeras presentaciones mundialistas y lo concretaron al vencer a Corea del Sur en el segundo duelo.
Sin embargo, la victoria de Alemania sobre Suecia, en el último minuto, con gol de tiro libre de Toni Kroos, puso en jaque al Tri, obligándolo a sacar al menos un empate contra los vikingos suecos para lograr sus boletos a octavos, algo que cumplen religiosamente desde 1994.
El partido, por tanto, es de máxima tensión. Los mexicanos sentirán el asedio y deberán sobrevivir para poder seguir con vida en el torneo más eléctrico de los últimos tiempos, el más dramático para los favoritos.
“De nada nos sirve haberle ganado a Alemania y a Corea del Sur si no llegamos a los cruces. Debemos ser humildes y mirar con mucho respeto al rival (Suecia); concentrarnos y darlo todo por nuestro país, enfatizó Hirving 'El Chucky' Lozano, autor del memorable gol que le dio la victoria al Tri ante la poderosa Mannschaft.
Los aztecas llegan con seis puntos y un balance de tantos a favor y en contra de más dos (3-1), mientras sus los suecos y los germanos exhiben tres unidades cada uno y cero en el casillero de gol average (2-2).
Un triunfo de Alemania ante Surcorea por más de un gol y una victoria de Suecia sobre México, de cualquier tipo, dejaría fuera al Tri, para muchos el mejor equipo de la Copa Mundial de Rusia, y junto con Argentina el que más hinchas mueve por toda Rusia.
A tal punto llega la excelencia que México pudiera hacer más historia en Rusia si logra vencer a Suecia porque, de plano, se convertiría en el primer equipo de la Confederación de Norte, Centroamérica y el Caribe en ganar tres partidos al hilo en copas del mundo.
Aunque, reiteramos, un 'simple' empate les sirve a los aztecas para lograr el primer lugar del grupo F y la clasificación a octavos, algo mucho más importante que las estadísticas.
Depender de sí mismos es una bendición divina, pues podrán manejar los hilos del partido. Ahora bien, si Suecia logra marcar primero e irse delante en el marcador, las prisas agobiarán a todo México y los nervios pudieran jugarle una mala pasada, mucho más si -como señalan los expertos- Alemania golea a Corea del Sur.
El único precedente entre mexicanos y suecos data de 1958, cuando los vikingos organizaron la justa y superaron a los aztecas por goleada 3-0. Después de aquello pasaron 60 años y estallaron muchas guerras en el planeta Tierra, pero el fútbol tiene memoria.
México está a las puertas del paraíso, eso es un hecho, sin embargo en el retrovisor, tormentoso, arde el fuego del infierno.