La Habana, 27 feb. (PL).- La recién estrenada temporada 2019 para el atletismo cubano ya dejó en los libros el récord nacional igualado de Roberto Skyers en los 100 metros, un tiempo con el que lanzó su candidatura para conquistar una medalla en los Juegos Panamericanos de Lima.

Skyers, campeón panamericano de los 200 metros en Guadalajara-2011 y centrocaribeño en Veracruz-2014, empató el primado de 9.98 segundos del estelar Silvio Leonard, conseguido el 11 de agosto de 1977 en la ciudad mexicana de Guadalajara, durante las eliminatorias a la Copa del Mundo de Dusseldorf.

El mejor velocista cubano de la actualidad realizó la carrera de su vida en el Memorial Rafael Fortún, disputado en la ciudad de Camagüey, unos 574 kilómetros al este de esta capital, ante la fuerte oposición de su compatriota Reynier Mena, segundo con 10,06 segundos, también con marca personal. Solo Leonard, subcampeón olímpico de Moscú-80, había logrado bajar de los 10 segundos en la prueba reina del atletismo en la Mayor de las Antillas.

Aquel 9.98 de 1977 fue el segundo crono electrónico inferior a los 10 segundos, conseguido en condiciones normales (aire permisible de dos metros por segundos), solo antecedido por los 9.95 del estadounidense Jim Hines en los Juegos Olímpicos de México 1968, que permaneció como tal hasta 1983, cuando otro estadounidense, Calvin Smith, marcó 9.93.

El récord de Leonard permanece como la segunda más longeva del atletismo cubano, solo precedida por los 13:44.8 minutos del guantanamero Luis Medina en los cinco mil metros, tiempo alcanzado el 21 de junio del propio 1977, en Praga.

Desde que logró el primado cubano, solo acecharon los 9.98 segundos, el propio Leonard en ese mismo año, el 13 de septiembre, con 10.03 durante las Espartaquiadas de los Ejércitos Amigos celebradas en La Habana, y más tarde Leandro Peñalver y Andrés Simón, ambos con 10.06, el primero en 1983 y el segundo, en 1987.

Además, el crono de Skyers es el primero inferior a los 10 segundos realizado en Cuba por cualquier velocista, el mejor estaba en poder del brasileño Robson Caetano da Silva, con 10.02 segundos, desde el 27 de septiembre de 1986, en el marco del II Campeonato Iberoamericano de Atletismo.

Ya en las semifinales del Rafael Fortún, Skyers ofreció una clarinada, al conseguir un registro personal de 10.02 segundos para mejorar su cota de 10.11, conseguida en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015.

Natural del municipio camagüeyano de Minas, el bólido cubano despuntó en 2009, cuando -con apenas 18 años de edad en el propio Rafael Fortún- implantó un récord nacional juvenil en 200 metros, con marca de 20.24 segundos, mientras que en el hectómetro detuvo los relojes en 10.31.

Dos temporadas después conquistó el título en los Juegos Panamericano de Guadalajara, y luego las lesiones y un rendimiento inestable signaron la carrera del antillano, nacido el 12 de noviembre de 1991.

Más tarde ganó en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Veracruz 2014 y en los Panamericanos de Toronto 2015, pese a terminar cuarto en los 200 metros, rompió el récord nacional de 20.06, con un crono de 20.02 segundos,

Sin embargo, de nuevo aparecieron los problemas y tuvo dos campañas posteriores con más penas que glorias.

En la mira, Sykers ya tiene los Juegos Panamericanos de Lima, del 26 de julio al 11 de agosto, y el Campeonato Mundial de Doha, del 27 de septiembre al 6 de octubre, evento este último, para el que logró la mínima exigida (10.10), en unión de Mena.

De marcar 9.98 o un tiempo mejor en la capital peruana, el cubano podría conquistar el título del héctómetro si tenemos en cuenta que el vencedor de la cita precedente de Toronto 2015, el canadiense Andre De Grassesi, lo hizo con 10.05 segundos.

Desde hace casi 40 años, Cuba no ubica a un finalista olímpico en la prueba reina de la velocidad. La última vez que ello sucedió fue en los Juegos de Moscú, en 1980, con Leonard como protagonista.

Ya desde la década de los años 20 del pasado siglo, la mayor de las Antillas tuvo un hombre como José 'Pepe' Barrientos, capaz de igualar en 1928 el récord mundial del hectómetro, una tradición mantenida más tarde por José Torriente, Jacinto Ortiz, Fortún y Raúl Mazorra.

Después del triunfo de la Revolución Cubana en 1959, brillaron figuras de la talla de Enrique Figuerola, subcampeón olímpico de Tokio-1964, Hermes Ramírez, Pablo Montes, José Triana Matamoros, Leonard, Osvaldo Lara, Peñalver y Simón, entre otros muchos.

En las décadas de los años 60 y 70, los corredores cubanos lograron muchos resultados de primer nivel (entre los 50 primeros del mundo), y tuvieron presencia en las finales de las Olimpiadas de Roma-1960, Tokio-1964 y México-1968.

Luego, de 1980 a 1986, se lograron 10 de las mejores marcas del orbe y 35 registros entre los 100 primeros, antes de comenzar un declive acelerado hasta la fecha.