La Habana, 12 abr (JIT) El presidente del Inder, Osvaldo Vento Montiller, compartió hoy un amplio grupo de apreciaciones con los integrantes de la comisión de Salud y Deportes de la Asamblea Nacional del Poder Popular.
En la sala 11 del Palacio de Convenciones, el titular aseguró de inicio que «debemos hacer un razonamiento crítico y salir de la autocomplacencia. Si uno cree que el trabajo marcha bien, pero el pueblo piensa distinto, entonces las cosas no están bien».
En su amplia intervención recordó que el deporte es una conquista de la Revolución, y más que eso «es la Revolución misma». Por eso insistió en la necesidad de brindar información clara a la ciudadanía, sin secretismos, y coincidió en que rectificar errores es algo positivo para el país.
Vento Montiller fijó una serie de retos esenciales para el deporte cubano en la actualidad, entre los cuales priorizó la elevación del nivel científico, académico y pedagógico de los maestros.
«Prefiero llamarles maestros y no entrenadores. Son maestros, educadores, y deben pasar de la instrucción a la educación», aseguró antes de recalcar que en esos colectivos hay que elevar la moral de combate y exigir humildad y sencillez a toda hora.
En otro momento, el recién nombrado presidente del Inder afirmó que «los resultados no serán sostenibles si no aplicamos la ciencia, si no aprovecharemos todas las posibilidades del país en ese sentido».
Otro tema cardinal en sus palabras tuvo que ver con la actividad en la base, cuyo refuerzo incluye «recuperar hasta el último campo de béisbol, pues se trata de la identidad nacional y, más que eso, de un tema de seguridad nacional».
«También hay que “inudar” el país de medios para el béisbol. Y si no nos alcanzan los técnicos, entonces hay que apelar a los activistas que los tenemos por arrobas», comentó.
En ese propio sentido reconoció que falta diálogo con las personas para movilizarlas en bien del deporte y la actividad física en los territorios, y se mostró convencido de la necesidad de rescatar los eventos interescuelas.
«Invertir en actividad física y deportes implica ahorrar en medicinas y atención médica», recordó.
Sobre el completamiento de los recursos humanos en el sistema, Vento Montiller adelantó que en septiembre comienza la experiencia del ciclo corto en la educación superior para formar técnicos deportivos. «Eso nos colocará en mejores condiciones», consideró.
También lamentó la pérdida de vínculos de trabajo con la Universidad de Ciencias de la Cultura Física y el Deporte Manuel Fajardo (UCCFD), lo cual está en fase de transformación porque «somos nosotros los que tenemos que acompañar a la universidad», sostuvo.
La actualidad en torno a la selección cubana de béisbol tuvo espacio en sus comentarios: «Anglada tiene gran aceptación en la afición, pero no se puede simplificar la dirección del equipo Cuba a un hombre. Esa dirección tiene que ser una gran familia».
«La pelota será una de las locomotoras en los Juegos Panamericanos de Lima. En la preselección se respira ese aire de victoria y de clasificación hacia Tokio 2020», agregó.
Luego explicó que los resultados en el deporte cubano dependen en buena medida de la relación armónica que se establece entre aspectos técnicos y tácticos, entre teoría y práctica, entre lo político y lo ideológico, contando por supuesto con entrenadores experimentados y evaluando en todo momento la incidencia familiar.
En el cierre de su intervención Vento expresó que ganar entre 35 y 40 medallas de oro en los Panamericanos de Lima es un enorme y complejo reto.
Reflexionó sobre el hecho de que con ese botín dorado podríamos no mejorar el lugar en la tabla (cuarto) en Toronto 2015, o suceder todo lo contrario: ganar menos títulos y ascender en el medallero. Esas variantes dependerán de cómo se manifieste la correlación de fuerzas con los rivales.
«Hay que hacer análisis objetivos, reales, sin crear falsas expectativas en la población», concluyó.